El Sueño de Lola
Había una vez en un tranquilo barrio de Buenos Aires, una niña llamada Lola. Desde muy pequeña, Lola tenía un sueño: quería ser cantante.
Le encantaba cantar en la ducha, en la cocina mientras su mamá preparaba la cena y hasta frente al espejo con su cepillo como micrófono.
Un día, cuando le preguntó a sus padres si podía tomar clases de canto para mejorar su voz y poder cumplir su sueño, ellos le dijeron que no tenían suficiente dinero para pagarlas. A pesar de la tristeza inicial, Lola decidió que eso no iba a detenerla. Ella era persistente y estaba determinada a convertirse en una gran cantante.
Así que Lola comenzó a buscar otras formas de aprender a cantar. Se puso a investigar en internet y encontró tutoriales gratuitos que le enseñaron técnicas vocales básicas.
Practicaba todos los días después de hacer sus deberes escolares y siempre pedía consejos a su abuelita, quien había sido corista en su juventud. Con el tiempo, Lola se dio cuenta de que necesitaba más práctica y experiencia real. Decidió presentarse en concursos locales de talento amateur.
Al principio estaba nerviosa, pero cada vez que subía al escenario se sentía más segura y feliz. Un día, durante uno de esos concursos, un cazatalentos quedó impresionado por la voz de Lola y le ofreció la oportunidad de grabar una canción en un estudio profesional.
¡Lola no podía creerlo! Finalmente estaba viendo cómo su sueño comenzaba a hacerse realidad. "¿En serio me estás diciendo que podré grabar mi propia canción?" -preguntó emocionada Lola al cazatalentos.
"¡Sí! Creo firmemente en tu talento y estoy seguro de que llegarás muy lejos," -respondió él con una sonrisa. Lola trabajó arduamente en el estudio junto con compositores y productores musicales para crear su primera canción original. La emoción de escuchar su voz mezclada con instrumentos profesionales era indescriptible.
Finalmente llegó el día del lanzamiento oficial de la canción de Lola. Sus padres estaban allí para apoyarla y toda la familia estaba ansiosa por escucharla brillar como nunca antes lo había hecho.
La canción fue un éxito rotundo; las radios locales empezaron a transmitirla y pronto recibió invitaciones para cantar en diferentes eventos artísticos por toda la ciudad. Lola había demostrado que con perseverancia, esfuerzo y pasión se pueden superar cualquier obstáculo para alcanzar los sueños más grandes.
Y así fue como aquella niña sin recursos económicos pero llena de determinación se convirtió en la famosa cantante que siempre soñó ser: ¡Lola La Persistente!
FIN.