El sueño de Lucio

Lucio era un niño curioso y soñador que siempre había querido ser astronauta. Desde pequeño, miraba las estrellas con admiración y se imaginaba viajando por el espacio.

Sin embargo, todos a su alrededor le decían que era imposible, que era un sueño demasiado grande para un niño como él. Pero Lucio no se rindió. Decidió estudiar todo lo que pudiera sobre el espacio, los planetas y las estrellas. Pasaba horas en la biblioteca, devorando libros sobre astronautas y exploración espacial.

Un día, se enteró de un concurso de ciencias en el que el premio era una visita a la NASA. Lucio trabajó día y noche en un proyecto sobre el sistema solar, poniendo todo su empeño y creatividad.

Finalmente, llegó el día de la presentación. "¡Buena suerte, Lucio!" le dijo su mamá. "Gracias, mamá. Voy a dar lo mejor de mí", respondió Lucio con determinación. Cuando llegó el momento de anunciar al ganador, Lucio estaba nervioso pero emocionado.

Para su asombro, su nombre fue el que resonó en la sala. Había ganado el concurso. La visita a la NASA fue increíble. Lucio conoció a astronautas, vio simulaciones de viajes espaciales y hasta pudo tocar una roca lunar.

Ese día, descubrió que su sueño era posible, y que solo dependía de él seguir luchando por él.

Y así, Lucio siguió estudiando y esforzándose, hasta que finalmente cumplió su sueño de convertirse en astronauta y viajar por el espacio, demostrando que con perseverancia y pasión, los sueños pueden hacerse realidad.