El sueño de Mateo
Había una vez en la ciudad de Buenos Aires, un niño llamado Mateo que desde muy chiquito estaba fascinado con los medios de transporte. Le encantaba ver pasar los colectivos, trenes y aviones, soñando algún día poder manejarlos.
Un día, Mateo recibió de regalo un libro sobre todos los medios de transporte del mundo. Pasaba horas leyéndolo y aprendiendo sobre cada uno de ellos. Decidió entonces que cuando creciera quería ser piloto de avión.
Con el paso de los años, Mateo se esforzó mucho en la escuela para aprender todo lo necesario y cumplir su sueño. Estudiaba mucho y practicaba simulaciones de vuelo en su computadora.
Finalmente, llegó el día en que Mateo cumplió 18 años y pudo ingresar a la escuela de pilotos. Con dedicación y esfuerzo logró graduarse como piloto comercial. Su sueño se había hecho realidad.
Mateo volaba por todo el mundo llevando a personas a sus destinos con seguridad y alegría. Siempre recordaba aquel niño curioso que soñaba con volar alto en el cielo. "Nunca te rindas, Mateo", le decía su abuelo con una sonrisa orgullosa-.
FIN.