El sueño de Ser docente

En un lejano pueblo llamado Alegría, vivía una niña llamada Luna. Luna era una niña muy curiosa y siempre estaba ávida de conocimiento. Le encantaba observar a su maestra, la señorita Violeta, y soñaba con ser docente cuando creciera.

Un día, la señorita Violeta le propuso a Luna que liderara un proyecto para embellecer la escuela. Luna aceptó emocionada y se puso manos a la obra. Durante semanas, trabajó incansablemente junto a sus compañeros para pintar murales, sembrar flores y mejorar los espacios comunes de la escuela. Todos quedaron sorprendidos por la dedicación y el entusiasmo de Luna.

Finalmente, llegó el día de la gran inauguración del proyecto. Los padres, maestros y alumnos se reunieron para ver el maravilloso trabajo de Luna y sus compañeros. La señorita Violeta elogió el esfuerzo de todos y destacó el liderazgo y la creatividad de Luna, quien emocionada agradeció a su maestra por inspirarla.

Ese día Luna comprendió que ser docente va más allá de enseñar en un aula, es también inspirar, guiar y motivar a los demás. La señorita Violeta le confesó a Luna que veía en ella el potencial para convertirse en una gran maestra en el futuro.

Desde entonces, Luna siguió esforzándose en la escuela, siempre con el sueño de convertirse en docente y seguir inspirando a otros como la señorita Violeta lo había hecho con ella.