El sueño de Simón

Simón era un niño apasionado por el fútbol, siempre estaba jugando con sus amigos en la plaza y soñaba con ser como Lionel Messi, su ídolo.

Un día, mientras jugaba en la canchita de su barrio, vio a lo lejos a una persona muy conocida: ¡era Messi! Simón no podía creerlo, se quedó paralizado mirando al astro del fútbol que se acercaba hacia él.

Al llegar, Messi le sonrió y le preguntó:- Hola amigo ¿quieres jugar un partido conmigo? Simón no podía creer lo que acababa de escuchar. Él iba a jugar al fútbol contra su ídolo. Sin pensarlo dos veces aceptó la invitación.

Comenzaron a jugar y Simón se esforzó al máximo para impresionar a Messi. El partido estaba empatado 2-2 cuando ocurrió algo inesperado: un niño del equipo contrario cayó al piso y comenzó a llorar. Messi rápidamente corrió hacia el niño para ver si estaba bien.

Simón también fue hasta allí para ayudar. Descubrieron que el niño había perdido su medalla de oro que había ganado en un campeonato anterior. Messi propuso buscarla juntos y todos los niños del partido aceptaron ayudar en la búsqueda.

Recorrieron toda la cancha buscando entre el pasto hasta que finalmente encontraron la preciosa medalla. El equipo contrario les agradeció mucho por haberlos ayudado y Messi felicitó a todos los niños por trabajar juntos para lograrlo.

Después de ese momento especial, Simón nunca olvidaría lo que había aprendido: que el trabajo en equipo y la ayuda a los demás son valores importantes tanto dentro como fuera de la cancha.

Desde ese día, Simón siguió jugando al fútbol con pasión, pero también comenzó a ayudar a sus amigos cuando lo necesitaban. Y cada vez que recordaba aquel partido junto a Messi, se sentía feliz por haber tenido la oportunidad de conocerlo y aprender de él.

Y así termina esta historia inspiradora para todos los niños amantes del fútbol.