El sueño de Sofía



Había una vez en un pequeño pueblo de Argentina, una niña llamada Sofía. Desde muy pequeña, Sofía siempre admiraba a las monjas que vivían en el convento cercano a su casa.

Le parecían seres llenos de luz y amor, y soñaba con algún día convertirse en una de ellas. Un día, mientras caminaba por la plaza del pueblo, vio un cartel que anunciaba la celebración de los 50 años de vida religiosa de Sor Gloria Esperanza Vásquez López.

Sofía se emocionó mucho al leerlo y decidió asistir al evento para honrar a aquella mujer tan especial. El día del festejo llegó y el salón estaba lleno de gente. Había música, comida deliciosa y risas por doquier.

En medio de todo el bullicio, Sofía logró acercarse a Sor Gloria para felicitarla. "¡Felicidades Sor Gloria! Estoy muy feliz por usted", dijo Sofía con entusiasmo.

Sor Gloria le sonrió amablemente y le preguntó:"¿Y tú qué sueñas hacer cuando seas grande?"Sofía no dudó ni un segundo en responder:"Yo quiero ser como usted, Sor Gloria. Quiero dedicar mi vida a servir a Dios y ayudar a los demás".

Sor Gloria quedó impresionada por la determinación de la pequeña Sofía y decidió contarle su historia. "Querida Sofía, cuando yo era joven también tenía grandes sueños e ilusiones. Pero fue gracias a mi fe en Dios que encontré mi verdadera vocación como monja".

Sor Gloria contó cómo había ingresado al convento hace 50 años y cómo cada día había servido a Dios y a su congregación con amor y abnegación. También le habló sobre la importancia de ser leal y honesta en todo lo que hacemos.

Sofía escuchaba atentamente cada palabra de Sor Gloria, maravillada por su historia. Y así, el tiempo pasó volando mientras conversaban. Al finalizar la celebración, Sofía regresó a casa llena de inspiración y motivación para seguir sus sueños.

Decidió estudiar mucho y prepararse para algún día ingresar al convento como Sor Gloria. Los años pasaron y Sofía se convirtió en una joven inteligente y dedicada.

Siguiendo los consejos de Sor Gloria, estudió arduamente y se esforzó por ayudar a los demás en todo momento. Un día, recibió una carta del convento invitándola a una entrevista para entrar como postulante. Sofía estaba emocionada pero también nerviosa. Sabía que este era el primer paso para cumplir su sueño.

La entrevista fue un éxito y poco después recibió la noticia de que había sido aceptada como novicia en el convento HFIC. Estaba tan feliz que no podía creerlo. El día de su ingreso al convento llegó finalmente.

La emoción invadía el corazón de Sofía mientras caminaba hacia el altar junto con las otras novicias. Miraba a Sor Gloria con admiración, recordando aquel encuentro en la plaza del pueblo muchos años atrás.

Y así comenzó la vida religiosa de Sofía, siguiendo los pasos de Sor Gloria Esperanza Vásquez López. Aprendió a servir con amor y abnegación a Dios y a su congregación HFIC.

Cada día, recordaba las palabras de Sor Gloria sobre la importancia de ser leal y honesta en su camino. Con el tiempo, Sofía se convirtió en una monja ejemplar al igual que Sor Gloria.

Su trabajo y servicio apostólico eran reconocidos por todos, pero lo más importante era la felicidad que sentía al saber que estaba cumpliendo su verdadera vocación. Y así, la historia de Sofía nos enseña que cuando seguimos nuestros sueños con amor y dedicación, podemos encontrar nuestra verdadera felicidad.

Y como Sor Gloria Esperanza Vásquez López, podemos dejar un legado inspirador para las generaciones futuras.

FIN.

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