El sueño de Tomás
Había una vez un niño llamado Tomás que amaba el fútbol más que nada en el mundo. Soñaba con ser como Neymar y jugar en los estadios más grandes del mundo.
Un día, mientras jugaba en la plaza con sus amigos, escuchó a unos turistas hablar sobre su viaje a París para ver un partido de fútbol en el Estadio Parque de los Príncipes.
Tomás no podía creerlo, ¡eso era lo que él quería hacer algún día! Decidió acercarse a ellos y preguntarles cómo habían conseguido las entradas para el partido. Los turistas le explicaron que las habían comprado por internet y que era muy fácil.
Tomás regresó a casa emocionado y decidió pedirle ayuda a su mamá para comprar las entradas para él y su papá. Pero cuando le contó sobre su plan, ella le dijo: "Lo siento hijo, pero no podemos permitirnos ese viaje ahora mismo". Tomás se sintió muy triste al escuchar eso.
Pero no se rindió tan fácilmente. Decidió buscar formas de ganar dinero por sí mismo para pagar el viaje. Comenzó vendiendo limonada frente a su casa y haciendo pequeños trabajos para sus vecinos.
Poco a poco fue ahorrando dinero hasta tener suficiente para comprar las entradas. "¡Mamá, papá! ¡Ya tengo suficiente dinero! Podemos ir al Estadio Parque de los Príncipes!" exclamó Tomás emocionado.
Sus padres se sorprendieron al ver todo el esfuerzo que había puesto Tomás para lograr su objetivo. Conmovidos por su dedicación, decidieron acompañarlo en su aventura. Cuando llegaron a París, Tomás estaba maravillado. El estadio era impresionante y la emoción de estar allí para ver el partido era indescriptible.
Mientras veían el juego, Tomás se dio cuenta de algo importante. No importaba cuánto dinero tuvieras o cuán grande fuera el estadio en el que jugaras, lo importante era amar lo que hacías y esforzarte por conseguir tus sueños.
Al final del partido, Neymar salió al campo a saludar a los fanáticos. "¡Neymar! ¡Neymar!" gritaron todos emocionados. Tomás no podía creer que estaba tan cerca de su ídolo.
De repente, Neymar se acercó a ellos y le entregó su camiseta autografiada a Tomás. "Sigue trabajando duro y persiguiendo tus sueños", le dijo antes de irse. Tomás nunca olvidaría ese momento especial en el Estadio Parque de los Príncipes.
Aprendió que con dedicación y esfuerzo puedes alcanzar cualquier objetivo que te propongas.
FIN.