El sueño de Tomi
Tomi siempre había sido un niño muy curioso, y desde que aprendió sobre los dinosaurios en la escuela, su mayor deseo era conocerlos en persona.
Pero como vivía en una ciudad grande, no sabía cómo hacer para ver a estos animales prehistóricos. Un día, mientras estaba jugando con sus amigos en el parque, Tomi se encontró con un hombre muy extraño. Era alto y delgado, vestido con ropa de explorador y llevaba una mochila llena de herramientas.
"¡Hola pequeño! ¿Qué haces aquí?", preguntó el hombre. "Estoy jugando con mis amigos", respondió Tomi. "¿Y qué te parece si te cuento un secreto? Yo sé dónde puedes encontrar dinosaurios de verdad", dijo el hombre misterioso.
Tomi no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Sería posible que finalmente pudiera cumplir su sueño? El hombre le explicó que había descubierto un lugar donde aún existían dinosaurios vivos.
Se trataba de una isla alejada de todo, donde habían sobrevivido durante millones de años gracias a las condiciones especiales del clima y la geografía. "Pero necesito tu ayuda para llegar allí", continuó el hombre. "Necesito alguien valiente y aventurero como tú". Tomi aceptó sin dudarlo ni un segundo.
El hombre le dio unas coordenadas para encontrar la isla y le prometió llevarlo allí en su avión privado al día siguiente. La noche antes del viaje, Tomi no podía dormir por la emoción.
¿Realmente iba a conocer a los dinosaurios? ¡Era demasiado bueno para ser verdad! Pero al día siguiente, el hombre llegó puntualmente y lo llevó en su avión hacia la isla desconocida. Cuando aterrizaron, Tomi no podía creer lo que veían sus ojos.
Había dinosaurios de todos los tamaños y formas: tiranosaurios rex, estegosaurios, velociraptores... "¿Esto es real?", preguntó Tomi. "Lo es", respondió el hombre misterioso. "Pero debemos tener cuidado. Estos animales son muy peligrosos".
Tomi se sintió un poco asustado, pero también emocionado por estar allí. El hombre le dio un casco y una linterna para explorar las cuevas donde vivían los dinosaurios más grandes.
Mientras caminaban por la oscuridad de la cueva, Tomi escuchaba rugidos extraños a su alrededor. Pero cuando llegaron al final del camino, encontraron algo que nunca habrían esperado: había un huevo gigante en el medio de la sala. "¡Es un huevo de tiranosaurio!", exclamó el hombre misterioso.
Tomi estaba maravillado con lo que veía frente a él. De repente, comenzaron a escuchar ruidos detrás de ellos. Un tiranosaurio rex adulto se acercaba rápidamente hacia ellos.
El hombre misterioso sacó una pistola tranquilizante y logró dormir al animal justo antes de que atacara a Tomi. "Debemos irnos rápido", dijo el hombre mientras cargaba al niño en sus brazos.
Cuando llegaron al avión privado para regresar a casa, Tomi estaba feliz de haber cumplido su sueño y conocer a los dinosaurios, pero también se dio cuenta de lo peligroso que había sido todo. "¡Nunca olvidaré esta aventura!", dijo Tomi mientras se despedía del hombre misterioso. "Y yo nunca me olvidaré de ti", respondió el hombre.
"Eres un niño valiente y aventurero". Desde ese día, Tomi aprendió que a veces hay cosas increíbles que pueden parecer demasiado buenas para ser verdad. Pero si tienes el coraje suficiente para enfrentarte a ellas, puedes vivir experiencias únicas e inolvidables.
FIN.