El Sueño del Tiempo Perdido
Había una vez un hombre llamado Martín, que desde pequeño no recibió la atención que necesitaba. Sus padres estaban siempre ocupados, y Martín, sin querer, se volvió malo y amargado.
Con el tiempo, se convirtió en un adulto triste que nunca sonreía. Un día, mientras caminaba por la calle, un accidente lo dejó en coma. En ese estado, Martín empezó a soñar con un mundo de fantasía donde el tiempo se había descompuesto.
Los días y las noches se mezclaban, las estaciones se sucedían sin orden y todo estaba en caos. Martín descubrió que su misión en ese mundo era encontrar la manera de arreglar el tiempo para devolver la armonía a esa tierra mágica.
Con valentía, emprendió un viaje asombroso, enfrentando desafíos y haciendo nuevos amigos en su búsqueda. A medida que avanzaba, Martín también comenzó a sanar por dentro. Descubrió la importancia del amor, la amistad y el perdón, aprendiendo lecciones que nunca había conocido.
Finalmente, tras superar grandes obstáculos, Martín logró arreglar el tiempo en el mundo de fantasía. En ese preciso instante, en el mundo real, Martín despertó del coma. Al despertar, algo había cambiado en él, ahora irradiaba bondad y comprensión.
Decidió dedicar su vida a ayudar a los demás y a transmitir las enseñanzas que trajo consigo de su extraordinaria aventura en el mundo de los sueños. Martín se convirtió en un ejemplo de superación y transformación, inspirando a todos los que lo conocían.
Y así, el hombre que una vez fue amargado y triste, se transformó en un ser lleno de luz y esperanza.
FIN.