El sueño futbolístico de Alejandro

. Desde pequeño, su padre lo llevaba a ver los partidos del equipo local y él quedaba maravillado con la habilidad de los jugadores en la cancha.

Un día, mientras entrenaba en el parque cerca de su casa, se acercó un hombre mayor que estaba observándolo jugar. Alejandro se acercó curioso y el hombre le preguntó si quería aprender algunos trucos para mejorar su juego. "¡Sí, por supuesto!"- respondió emocionado Alejandro.

El hombre le enseñó algunos movimientos nuevos y le dio consejos sobre cómo mejorar su técnica de pase y tiro al arco. A partir de ese día, Alejandro empezó a practicar con más dedicación aún. Pero no todo fue fácil para Alejandro.

En una ocasión, mientras jugaba un partido importante con su equipo escolar, sufrió una lesión en la pierna que lo obligó a dejar el fútbol por un tiempo. Se sintió muy desanimado pensando que nunca podría volver a jugar como antes.

"No te preocupes", dijo su papá consolándolo,"solo necesitas descansar y recuperarte bien". Alejandro siguió las recomendaciones médicas al pie de la letra y poco a poco comenzó a hacer ejercicios de rehabilitación para fortalecer su pierna lesionada.

Pasaron varias semanas hasta que finalmente pudo volver a entrenar con normalidad. Un día recibió una invitación para participar en una prueba en uno de los equipos juveniles más importantes del país.

Estuvo nervioso durante toda la semana previa al evento pero sabía que había trabajado duro para estar preparado. Cuando llegó el gran día, Alejandro demostró toda su habilidad en el campo y dejó una gran impresión en los entrenadores.

Al final de la prueba, uno de ellos se acercó a él y le dijo:"Alejandro, felicitaciones, has sido seleccionado para formar parte del equipo juvenil". Alejandro no podía creerlo, había logrado su sueño.

Ahora tendría la oportunidad de jugar al fútbol en un nivel más alto y seguir aprendiendo cada día. Desde ese momento, Alejandro siguió entrenando con dedicación y perseverancia, sabiendo que las lesiones o los obstáculos no eran excusas para abandonar sus metas.

Y así fue como se convirtió en un jugador profesional de fútbol reconocido en todo el mundo. La historia de Alejandro es una inspiración para todos aquellos niños que tienen un sueño por cumplir y están dispuestos a trabajar duro para conseguirlo.