El sueño mágico de Anita

Anita era una niña muy especial, siempre tenía una sonrisa en el rostro y le encantaba jugar con sus amigos. Sin embargo, había algo que la preocupaba: los lunes. Para Anita, los lunes eran terribles.

Le costaba mucho levantarse temprano para ir a la escuela y prefería quedarse durmiendo en su cama. Un día, mientras desayunaba con su mamá, Anita dijo:- Mamá, no quiero ir a la escuela hoy. Me siento cansada.

- Pero hija -respondió su mamá-, es importante que vayas a la escuela todos los días para aprender cosas nuevas y estar con tus amigos. Pero Anita seguía sin estar convencida.

Así que decidió hablar con sus amigos para ver si ellos también se sentían así los lunes. - ¿A ustedes también les cuesta levantarse los lunes? -preguntó Anita. - Sí -respondieron algunos de sus amigos-. Pero sabemos que es importante ir a la escuela para aprender cosas nuevas y divertirnos juntos.

Anita se sintió un poco mejor al saber que no era la única que se sentía así los lunes. Pero aún así, seguía sin querer ir a la escuela ese día.

Esa noche, antes de dormir, Anita tuvo un sueño muy especial. Soñó que estaba en medio de un bosque mágico rodeada de hadas y duendes.

Ellos le dijeron:- Anita, sabemos que te cuesta levantarte los lunes pero recuerda lo importante que es ir a la escuela para aprender cosas nuevas y hacer nuevos amigos. Anita despertó sintiéndose más motivada e inspirada. Decidió que, a pesar de su cansancio, iría a la escuela ese día.

Cuando llegó a la escuela, Anita se encontró con una sorpresa: había una actividad especial en clase. La maestra les enseñaría cómo hacer un jardín vertical con plantas y flores. Anita se emocionó mucho y trabajó duro para crear el jardín más bonito de todos.

Al final del día, cuando regresaba a casa, Anita se dio cuenta de algo muy importante: los lunes no tienen por qué ser aburridos o difíciles si uno encuentra algo que lo motive e inspire.

Desde entonces, Anita nunca volvió a tener miedo de los lunes. Aprendió que cada día es una oportunidad para aprender cosas nuevas y divertirse junto a sus amigos.