El Sueño Musical de Borjita
Borjita era un niño de ocho años apasionado por la música. Desde pequeño, le encantaba tocar el tambor y soñaba con ser un gran músico y dar la vuelta al mundo alegrando a las personas con su música.
Un día, mientras tocaba en el parque, se acercó una señora mayor que lo escuchó tocar y le preguntó: "¿Eres músico?" "Sí", respondió Borjita con orgullo-. "Tocas muy bien", dijo la señora. —"Gracias" , respondió Borjita sonriendo.
La señora le contó que ella había sido cantante en su juventud y que había viajado por todo el mundo llevando su música a muchas personas. Le dijo también que para lograr sus sueños debía practicar mucho y nunca rendirse.
Borjita tomó las palabras de la señora como una inspiración y decidió seguir practicando todos los días. Comenzó a asistir a clases de música en una escuela cercana a su casa y aprendió a tocar otros instrumentos además del tambor.
Un día, mientras tocaba en un festival local, llamó la atención de un famoso productor musical quien quedó impresionado por su talento. El productor le ofreció grabar un disco para difundir su música por todo el país.
Borjita estaba emocionado pero también tenía miedo de no estar preparado para semejante desafío. Fue entonces cuando recordó las palabras de la señora mayor: "nunca te rindas". Así que aceptó el desafío y comenzaron las grabaciones para su primer disco.
El lanzamiento del disco fue un éxito y Borjita comenzó a recibir invitaciones para tocar en diferentes ciudades del país. Pero su mayor sueño era dar la vuelta al mundo llevando su música a todos los rincones.
Un día, recibió una invitación para tocar en un festival internacional de música en Europa. Borjita estaba emocionado pero también nervioso por el desafío que tenía por delante.
Finalmente, llegó el día del festival y Borjita subió al escenario frente a miles de personas de todo el mundo. Comenzó a tocar sus canciones con pasión y energía, transmitiendo toda la alegría que había guardado dentro de él desde pequeño.
Al finalizar su presentación, las personas lo ovacionaron y le pidieron más música. Borjita se emocionó hasta las lágrimas al ver cómo su sueño se hacía realidad. Desde ese momento, Borjita recorrió el mundo llevando su música a todas partes y cumpliendo su mayor sueño.
Y aunque enfrentó muchos desafíos en el camino, nunca se rindió porque sabía que la clave para lograr sus objetivos era perseverar y seguir adelante con fe en sí mismo.
FIN.