El tapete de la libertad



Había una vez en un lejano reino, un esclavo llamado Tiberio que trabajaba para su amo cruel, Cuenca Pies. Cada día, Tiberio era obligado a hacer las tareas más pesadas y a soportar los malos tratos de su amo.

Un día, mientras barría el patio del castillo, Tiberio encontró un viejo tapete mágico entre las hojas caídas. Al tocarlo, el tapete comenzó a brillar y una voz misteriosa le dijo: "Tiberio, has sido elegido para una misión especial.

Este tapete te ayudará a cambiar tu destino". Tiberio no podía creer lo que estaba escuchando, pero decidió confiar en la magia del tapete y guardarlo bajo su túnica.

Esa noche, cuando todos en el castillo dormían, Tiberio se escapó con el tapete y emprendió un viaje hacia la libertad. Al amanecer, Cuenca Pies descubrió la desaparición de Tiberio y enfurecido ordenó a sus guardias que lo buscaran por todo el reino.

Mientras tanto, Tiberio volaba sobre el tapete mágico hacia tierras desconocidas. Después de varios días de viaje, Tiberio llegó a un pueblo donde conoció a una anciana sabia que vivía en una pequeña cabaña en el bosque.

La anciana le dijo: "Tienes un corazón valiente, querido Tiberio. Usa tu bondad y coraje para enfrentar tus miedos". Con estas palabras en mente, Tiberio decidió regresar al castillo para confrontar a Cuenca Pies y liberar a los demás esclavos que allí vivían.

Cuando llegó al castillo, se encontró con su amo furioso esperándolo con un látigo en mano. "¡Tú! ¿Cómo te atreves a volver?", gritó Cuenca Pies. "He vuelto para poner fin a tus injusticias y liberar a mi gente", respondió valientemente Tiberio.

Antes de que Cuenca Pies pudiera hacer algo más, Tiberio extendió el tapete mágico frente a él y pronunció unas palabras secretas. De repente, el castillo tembló y una luz brillante envolvió todo el lugar.

Cuando la luz se disipó, Cuenca Pies había desaparecido y en su lugar había un hombre arrepentido que pedía perdón por sus acciones pasadas. Los demás esclavos fueron liberados gracias al valor de Tiberio y al poder del tapete mágico.

Desde ese día en adelante, Tiberio se convirtió en un héroe respetado por todos en el reino y vivieron felices sin opresión ni injusticias gracias al coraje e inteligencia de este humilde esclavo convertido en salvador.

FIN.

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