El Tesoro de la Amistad
Había una vez en un pequeño barrio, dos niñas llamadas Sofía y Martina. Sofía tenía 5 años y a Martina ya le faltaba poco para cumplir 6. Ellas eran las mejores amigas, pero de vez en cuando tenían pequeñas discusiones.
Un día, jugando en el parque, comenzaron a discutir por quién tendría el turno para columpiarse. - '¡Es mi turno, Sofía!', dijo Martina con voz enérgica.
- 'Pero yo estaba aquí primero, ¡es justo que me toque a mí!', contestó Sofía con lágrimas en los ojos. La discusión se intensificó y ambas terminaron enojadas, separándose y jugando por separado.
Después de un rato, Martina se acercó a Sofía y le dijo: - 'Sofía, ¿sabes qué? No me siento bien jugando sin ti. ¿Por qué no jugamos juntas como siempre lo hacemos?'. Sofía, con una sonrisa, asintió y las dos amigas volvieron a unirse para construir un castillo en la arena.
A partir de ese día, cada vez que surgía una discusión, recordaban lo infelices que eran estando separadas, y rápidamente buscaban la forma de solucionar sus diferencias. Aprendieron que la amistad era como un tesoro que debían cuidar y que juntas eran mucho más felices.
Así, Sofía y Martina descubrieron que la verdadera diversión y felicidad estaba en jugar y estar juntas.
FIN.