El Tesoro de la Amistad
Fátima era una niña muy especial. Vivía en una casita pequeña y tenía una gran imaginación. Iba a primer grado y le encantaba ir a la escuela para aprender cosas nuevas. Pero Fátima tenía un problema: le costaba mucho compartir. Siempre quería tener para ella solamente todos sus juguetes, crayones y libros. Un día, la maestra les contó a todos los niños sobre un tesoro misterioso escondido en el aula.
- ¡Hoy vamos a buscar el tesoro de la amistad! -exclamó la maestra con entusiasmo.
Los niños se emocionaron mucho con la idea de encontrar un tesoro en el aula, así que se pusieron en parejas para comenzar la búsqueda. Fátima fue emparejada con Lucas, un niño muy social y compartidor.
- ¿Qué crees que será el tesoro? - preguntó Lucas, con una sonrisa. Pero Fátima respondió de manera cortante:
- No sé, pero espero que sea algo bueno. No me gusta compartir.
Los niños buscaron por todas partes del aula, abriendo cajones, revisando los libros y examinando cada rincón. Fátima y Lucas estaban buscando en el rincón de los juguetes, cuando Lucas encontró una nota debajo de un muñeco.
- ¡Mirá Fátima, encontré algo! - exclamó Lucas mientras sacaba la nota. La maestra se acercó y leyó en voz alta:
FIN.