El Tesoro de la Gratitud

- Había una vez en un hermoso valle llamado Nazaret, dos amigos llamados Mateo y Lucas, quienes eran vecinos desde que eran muy pequeños. Siempre jugaban juntos y se divertían mucho.

Pero un día, algo cambió en la amistad de Mateo y Lucas. Mateo comenzó a sentir envidia de su amigo Lucas, ya que su vaca producía más leche que la suya, y su huerto daba frutas más grandes y sabrosas.

Esto hizo que Mateo se sintiera triste y descontento, incluso dejó de jugar con Lucas.

Un día, Mateo escuchó sobre un tesoro misterioso que se encontraba en las montañas, y decidió ir en busca de él, con la esperanza de encontrar riquezas que lo hicieran sentir más feliz y exitoso que su amigo. Se adentró en la montaña en busca del tesoro, obsesionado por su envidia.

Pero en lugar de encontrar un tesoro material, se encontró con un misterioso anciano que le dijo: "El verdadero tesoro se encuentra en el corazón de quien agradece". Confundido, Mateo regresó a su casa. Al llegar, encontró a Lucas y su familia en apuros, ya que una tormenta había arruinado su huerto y su vaca enfermó.

Mateo, sintiendo compasión por su amigo, decidió ayudarlo con lo poco que tenía. Poco a poco, Mateo y Lucas volvieron a ser amigos, y juntos, con esfuerzo y gratitud, lograron reconstruir el huerto y cuidar a la vaca.

Mateo aprendió que el verdadero tesoro está en aprender a ser agradecido por lo que se tiene y en el amor y la amistad, y que la envidia solo trae infelicidad. Desde ese momento, Mateo y Lucas compartieron su amistad y gratitud, viviendo felices el resto de sus días.