El tesoro de las letras
Había una vez una niña llamada Ana, a quien le encantaba escuchar cuentos y relatos, pero que no sabía leer ni escribir.
A pesar de esto, ella soñaba con poder descifrar las páginas de un libro y escribir su propia historia. Un día, mientras paseaba por el bosque, encontró a una misteriosa mariposa de colores brillantes. La mariposa hablaba y le dijo a Ana: '-Hola, soy Luna, la guardiana de las letras y las palabras.
He estado buscando a alguien valiente y curioso como tú para confiarte un secreto.' Ana, sorprendida, escuchó atentamente. '-En lo más profundo del bosque, hay un árbol viejo y sabio que guarda un tesoro escondido: un libro encantado que puede enseñarte a leer y escribir.
Pero ten cuidado, el bosque está lleno de desafíos y peligros.' Animada por la mariposa, Ana decidió emprender la emocionante búsqueda. Durante su viaje, se encontró con criaturas amigables que le enseñaron secretos sobre las letras y las palabras.
También enfrentó desafíos que pusieron a prueba su valentía y determinación. Finalmente, llegó al árbol antiguo. Allí, descubrió el libro encantado y, con cada página que leía, el mundo de las letras cobraba vida ante sus ojos.
Poco a poco, Ana aprendió a leer y escribir, y con cada palabra escrita, su imaginación se expandía. Con el tiempo, se convirtió en una gran escritora de historias maravillosas.
La mariposa Luna, orgullosa de su aprendiz, la visitaba de vez en cuando para compartir nuevas aventuras. Y así, Ana, la niña que una vez no sabía leer ni escribir, descubrió el tesoro de las letras y lo compartió con el mundo.
FIN.