El tesoro de los libros
Había una vez en un pequeño pueblo de Argentina, dos amigas muy especiales llamadas Shakira y Kenia. Ambas eran niñas muy curiosas y siempre estaban buscando nuevas aventuras.
Un día, mientras exploraban el bosque cercano a su casa, encontraron una misteriosa cueva escondida entre los árboles. Sin pensarlo dos veces, decidieron entrar para descubrir qué secretos se ocultaban dentro.
Al adentrarse en la cueva, las niñas se sorprendieron al encontrar un mapa antiguo que parecía indicar la ubicación de un tesoro perdido. Llenas de emoción, decidieron seguir el mapa y buscarlo juntas. Caminaron durante horas siguiendo las indicaciones del mapa hasta llegar a un río profundo. No sabían cómo cruzarlo, pero Shakira tuvo una idea brillante.
"¡Kenia! ¿Qué tal si construimos un puente con las ramas que encontramos? Así podremos cruzar sin problemas", dijo Shakira emocionada. Las niñas trabajaron juntas recolectando ramas y formando el puente improvisado.
Con mucho cuidado, lograron cruzar al otro lado del río y continuaron su aventura en busca del tesoro. El mapa les guiaba hacia una colina empinada llena de rocas grandes. Parecía imposible escalarla, pero Kenia no se rindió fácilmente.
"Shakira, creo que podemos usar estas cuerdas para ayudarnos a subir", sugirió Kenia mientras mostraba unas cuerdas que habían encontrado antes en la cueva. Con determinación y trabajo en equipo, las niñas ataron las cuerdas a las rocas y se ayudaron mutuamente a escalar la colina.
Fue un desafío difícil, pero al final lograron llegar a la cima. Cuando llegaron a la cima de la colina, encontraron una puerta escondida en una pared de piedra.
Con emoción, abrieron la puerta y descubrieron el tesoro que tanto habían buscado: ¡un cofre lleno de libros!"¡Wow! Este tesoro es aún mejor de lo que esperábamos", exclamó Shakira emocionada. Las niñas abrieron los libros y se dieron cuenta de que cada uno contenía historias inspiradoras y educativas.
Desde ese día, Shakira y Kenia se convirtieron en grandes lectoras y aprendieron muchas cosas nuevas juntas. Con el tiempo, las niñas compartieron su amor por los libros con otros niños del pueblo.
Organizaron un club de lectura donde todos podían reunirse para leer y discutir sobre sus historias favoritas. Shakira y Kenia demostraron que con curiosidad, determinación y trabajo en equipo, se pueden superar cualquier obstáculo para alcanzar nuestros sueños.
Su aventura no solo les permitió encontrar un tesoro valioso, sino también descubrir el poder transformador de los libros. Y así termina esta historia infantil llena de enseñanzas importantes para los más pequeños.
Porque nunca debemos subestimar el poder del conocimiento y siempre debemos estar dispuestos a explorar nuevas aventuras junto a nuestros amigos.
FIN.