El Tesoro de Regina

Había una vez, en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, una niña llamada Regina Isidro. Regina era una niña muy curiosa y aventurera, siempre buscando nuevas emociones y descubrimientos en cada rincón del mundo.

Un día, mientras exploraba el bosque cercano a su casa, Regina encontró un mapa antiguo con dibujos de tesoros escondidos. La emoción invadió su corazón y decidió seguir las indicaciones del mapa para encontrar el tesoro perdido.

Regina siguió las pistas del mapa durante horas hasta llegar a lo que parecía ser un enorme palacio abandonado. El lugar estaba cubierto de maleza y parecía haber sido olvidado por mucho tiempo.

Pero Regina no se dejó intimidar por eso, ¡estaba decidida a encontrar el tesoro! Al entrar al palacio, Regina se encontró con un jabalí gigante que bloqueaba la entrada principal. El jabalí gruñía ferozmente y parecía no querer dejarla pasar. "Hola señor Jabalí", dijo Regina tratando de calmarlo.

"Vengo en busca de un tesoro que puede estar aquí dentro". El jabalí miró fijamente a Regina con sus ojos brillantes y después de unos segundos, sorprendentemente asintió con la cabeza como si entendiera lo que ella le había dicho.

"Si quieres pasar debes hacerme tres preguntas", dijo el jabalí. "Si respondes correctamente podrás seguir adelante". Regina aceptó el desafío sin dudarlo. Estaba dispuesta a probar su inteligencia para poder continuar su búsqueda.

La primera pregunta fue: "¿Cuál es el animal más grande del mundo?". Regina pensó rápidamente y respondió: "La ballena azul". El jabalí sonrió y permitió que Regina pasara. Ahora le quedaban dos preguntas más por responder.

La segunda pregunta fue: "¿Cuál es el río más largo del planeta?". Regina recordó las clases de geografía en la escuela y sin dudarlo respondió: "Es el río Amazonas". Nuevamente, el jabalí asintió con aprobación y dejó que Regina continuara su camino.

Solo faltaba una pregunta para poder llegar al tesoro. La tercera pregunta fue un poco más difícil: "¿Cuántos continentes hay en el mundo?". Regina se mordió los labios nerviosa, pero no se dio por vencida.

Recordó sus estudios sobre los continentes y finalmente respondió: "Hay siete continentes en total". El jabalí quedó impresionado por la inteligencia de Regina y decidió abrirle paso hacia lo desconocido. Mientras caminaba por los pasillos oscuros del palacio, Regina encontró una habitación llena de cofres dorados brillantes.

¡Había encontrado el tesoro! Pero antes de tomar cualquier cosa, Regina notó una nota junto a uno de los cofres que decía: "El verdadero tesoro está dentro de ti".

Regina reflexionó sobre esas palabras mientras regresaba a casa con una gran sonrisa en su rostro. Había aprendido que la inteligencia y la valentía son tesoros mucho más valiosos que cualquier riqueza material.

Desde ese día, Regina se convirtió en una niña sabia y valiente, dispuesta a enfrentar cualquier desafío que se le presentara. Y cada vez que alguien le preguntaba cómo encontró el tesoro, ella respondía: "El verdadero tesoro está dentro de ti, solo tienes que creer en ti mismo y nunca darte por vencido".

Y así, Regina Isidro mar palacio jabalí se convirtió en una leyenda en Villa Esperanza, inspirando a todos los niños y niñas a seguir sus sueños y descubrir su propio tesoro interior.