El Torneo Sostenible de Pedro, Marco y Kilian M
Había una vez dos hermanos llamados Pedro y Marco. Eran grandes fanáticos del fútbol y su ídolo absoluto era Kilian M., un famoso jugador que brillaba en los campos de Paris.
Pedro y Marco soñaban con conocerlo y aprender de él para poder convertirse en grandes futbolistas también. Un día, mientras jugaban en la cancha del barrio, se les ocurrió una idea genial. Decidieron escribirle una carta a Kilian M.,
expresándole su admiración y contándole sobre su deseo de conocerlo. Además, le explicaron que querían utilizar el fútbol como herramienta para promover el desarrollo sostenible entre sus compañeros. Con mucha emoción, enviaron la carta por correo y esperaron ansiosos una respuesta.
Pasaron los días y finalmente recibieron una carta dirigida a ellos. ¡Era Kilian M. ! En la carta les decía que estaba impresionado por su iniciativa y que estaría encantado de conocerlos. Pedro y Marco no podían creerlo.
Estaban tan emocionados que no podían dormir esa noche. Al día siguiente, tomaron un avión rumbo a Paris junto a sus padres para cumplir su sueño. Cuando llegaron al estadio donde entrenaba Kilian M.,
Pedro y Marco estaban nerviosos pero emocionados al mismo tiempo. Se encontraron cara a cara con su ídolo, quien resultó ser muy amable y cercano. "¡Hola chicos! Me alegra mucho conocerlos", dijo Kilian M. "¡Hola Kilian! Somos Pedro y Marco", respondieron los hermanos emocionados.
"He leído vuestra carta e me parece una idea fantástica. El fútbol puede ser una herramienta poderosa para promover el desarrollo sostenible entre los jóvenes", dijo Kilian M. Kilian M.
les propuso a Pedro y Marco ayudarlos a organizar un torneo de fútbol en su barrio, donde los niños pudieran aprender sobre la importancia del reciclaje, el cuidado del medio ambiente y la solidaridad. Los hermanos aceptaron emocionados y comenzaron a trabajar duro para hacer realidad ese evento tan especial.
Con la ayuda de Kilian M., Pedro y Marco organizaron todo el torneo. Invitaron a otros equipos del barrio, consiguieron patrocinadores y diseñaron talleres educativos sobre el desarrollo sostenible.
El día del torneo llegó y el estadio estaba lleno de alegría y entusiasmo. Los niños disfrutaban jugando al fútbol mientras aprendían sobre cómo cuidar el planeta. Al final del día, todos los participantes recibieron medallas por su compromiso con el desarrollo sostenible.
Pedro y Marco se sentían orgullosos de haber logrado algo tan importante junto a su ídolo Kilian M. Esa experiencia dejó una huella imborrable en la vida de Pedro, Marco y todos los niños que participaron en el torneo.
Aprendieron que el fútbol no solo es un juego, sino también una oportunidad para crear conciencia sobre temas importantes como la sustentabilidad.
Pedro y Marco siguieron practicando fútbol con pasión, pero ahora también se aseguraban de compartir sus conocimientos sobre desarrollo sostenible con sus compañeros de equipo. Juntos trabajaban para mantener limpios los campos de juego y promover la reutilización de materiales deportivos. Gracias a su esfuerzo, Pedro, Marco y Kilian M.
lograron inspirar a muchos otros jóvenes a utilizar el fútbol como una herramienta para un desarrollo sostenible. Y así, poco a poco, su barrio se convirtió en un ejemplo de respeto por el medio ambiente y solidaridad entre sus habitantes. Y colorín colorado, este cuento del fútbol sostenible ha terminado.
FIN.