El trabajo en equipo de Pepa, Pancho y Sabino
Había una vez una pequeña golondrina llamada Pepa, que vivía en un bosque muy frondoso. Todos los días, Pepa salía a buscar comida para ella y su familia.
Era una golondrina muy trabajadora y siempre estaba atenta a todo lo que pasaba a su alrededor. Un día, mientras volaba por el bosque, Pepa se encontró con una ardilla llamada Pancho. -Hola Pepa- dijo la ardilla-.
¿Qué haces por aquí? -Estoy buscando comida para mi familia- respondió Pepa. -Ah, yo también estoy buscando nueces para guardarlas para el invierno- dijo Pancho. Los dos amigos decidieron ayudarse mutuamente en la búsqueda de comida. Mientras volaban juntos, vieron un árbol lleno de deliciosas bayas rojas.
Sin embargo, había un problema: las bayas estaban en lo alto del árbol y no podían alcanzarlas. Pepa pensó en una solución: -¿Por qué no pedimos ayuda? - sugirió la golondrina. -¿A quién podemos pedirle ayuda? - preguntó Pancho.
-Podemos pedirle ayuda al búho Sabino- dijo Pepa-. Él es sabio y seguro nos dará algún consejo útil. Así que los dos amigos fueron al encuentro del búho Sabino.
Después de explicarle su problema, Sabino les dio un buen consejo: -Si trabajan juntos pueden lograrlo. Uno puede subir al árbol y sacudir las ramas mientras el otro recoge las bayas que caen al suelo- les dijo el búho sabio. Siguiendo ese consejo, Pepa y Pancho trabajaron juntos.
Pepa subió al árbol y sacudió las ramas con fuerza, mientras Pancho recogía todas las bayas que caían al suelo. Al final del día, habían recolectado suficiente comida para sus familias.
Gracias a la ayuda de Sabino y la colaboración entre ellos mismos, Pepa y Pancho aprendieron que trabajar en equipo es mucho más eficaz que hacerlo solos. Desde ese día en adelante, los dos amigos se convirtieron en inseparables compañeros de aventuras.
Y así termina esta historia inspiradora sobre la amistad y el trabajo en equipo de dos pequeños animales del bosque.
FIN.