El Unicornio Amigable

Hubo una vez en una hermosa casa de campo, donde vivía un unicornio bebé llamado Brillo. Brillo era conocido por su hermosa melena y su amigable personalidad.

Vivía en armonía con muchos animales en la granja, como el caballo Majo, la oveja Lanita, el perro Lucas y el gato Pelusa. Brillo era muy ayudador y siempre estaba dispuesto a colaborar con los demás animales en lo que necesitaran.

Un día, la granja sufrió un problema inesperado: los campos se secaron y los animales no tenían suficiente agua para beber. Aturdidos por la situación, todos los animales se reunieron para encontrar una solución. "¡Necesitamos agua para sobrevivir!" exclamó Majo. "No te preocupes, puedo ayudar", dijo Brillo con seguridad.

Se acercó al pozo mágico que se encontraba en el bosque y con su cuerno brillante tocó el agua. De repente, el agua comenzó a fluir abundantemente y llenó los recipientes de todos los animales.

La granja volvió a la vida y todos estaban felices y agradecidos con Brillo por su valiosa ayuda. A partir de ese día, Brillo se convirtió en el guardián del agua en la granja, asegurándose de que todos los animales tuvieran suficiente para beber.

Su amabilidad y generosidad inspiraron a los demás animales a ayudarse mutuamente y a cuidar su entorno. La historia de Brillo se convirtió en una lección para todos, demostrando que con voluntad y ayuda mutua, cualquier desafío puede superarse.