El unicornio del bosque encantado
En un hermoso bosque encantado vivían tres niños llamados Martín, Sofía y Juan. Un día, mientras exploraban el bosque, se encontraron con un majestuoso unicornio de pelaje blanco y brillante.
El unicornio los miró con cariño y les dijo: "Bienvenidos al bosque encantado, niños. Soy Luminoso, el guardián de este mágico lugar". Los niños, sorprendidos, le preguntaron cómo podían ayudar a cuidar el bosque.
Luminoso les explicó que las flores que crecían en el bosque eran muy especiales, ya que tenían el poder de traer alegría a quienes las encontraran. Pero últimamente, esas flores habían estado marchitándose debido a la falta de luz y cuidado.
Los niños se ofrecieron a ayudar y, con la ayuda del unicornio, buscaron la manera de traer de vuelta la luz al bosque. Decidieron recoger dulces de colores brillantes y colocarlos alrededor de las flores, creando hermosos caminos de caramelos.
Pronto, las flores comenzaron a recuperar su vitalidad y el bosque volvió a brillar con colores y alegría. Luminoso les agradeció a los niños por su ayuda y les otorgó una brillante gema mágica como recompensa. Los niños prometieron cuidar del bosque y regresar para seguir disfrutando de sus aventuras junto al unicornio.
Desde ese día, el bosque encantado volvió a ser un lugar lleno de vida, amor y magia.
FIN.