El valiente David y el gigante Goliath
En un lejano valle de la provincia de Córdoba, vivía un niño llamado David. Era pequeño pero valiente, y siempre llevaba consigo su honda y cinco piedras que recolectó del río.
Un día, las noticias llegaron al valle de que un gigante llamado Goliath estaba sembrando el miedo en las aldeas vecinas. Goliath era cruel y poderoso, y nadie se atrevía a enfrentarlo.
Decidido a poner fin al reinado del gigante, David se puso su túnica y tomó su honda y cinco piedras. "Voy a detener a Goliath y proteger a nuestro pueblo", declaró valientemente a su familia.
Al llegar al lugar donde se encontraba Goliath, el gigante se burló de David. "¿Crees que puedes vencerme, pequeño? ¡Soy invencible!" Goliath rugió con burla.
Sin temor, David cargó su honda con una piedra y apuntó directamente hacia el gigante. La piedra voló a gran velocidad y golpeó la frente de Goliath, quien cayó al suelo aturdido. El valiente niño corrió rápidamente y tomó la espada del gigante, poniéndola en su cuello. "Has sido derrotado, Goliath. Tu reinado de miedo ha terminado", proclamó David con valentía.
El pueblo entero vitoreó y celebró la valentía de David, quien se convirtió en un ejemplo de que la valentía y la determinación pueden vencer cualquier obstáculo, por más grande que parezca. Desde ese día, el valle vivió en paz y armonía, y David se convirtió en un símbolo de esperanza y coraje para todos.
FIN.