El valiente dragón que venció su miedo




En un reino lejano, vivía un dragón llamado Damián. A diferencia de otros dragones, Damián tenía un gran miedo a la oscuridad, y por eso vivía en una cueva iluminada por antorchas durante el día.

Por las noches, cuando el sol se ocultaba, el pobre Damián temblaba de miedo y no podía dormir. Un día, el rey del reino, enterado del problema de Damián, decidió pedir ayuda a la princesa Valentina, conocida por su valentía y compasión.

"Princesa Valentina, necesito tu ayuda. Nuestro querido dragón Damián sufre de miedo a la oscuridad, y no puede vivir plenamente mientras este temor lo atormenta. ¿Podrías ayudarlo a superar su miedo?" -le pidió el rey a la princesa.

Valentina, siempre dispuesta a ayudar a quienes lo necesitaran, aceptó de inmediato. "Claro que sí, majestad. Haré todo lo posible por ayudar a Damián". La princesa Valentina se acercó a la cueva de Damián y le propuso un trato.

"Damián, he venido para ayudarte a superar tu miedo a la oscuridad. Si aceptas, yo te proporcionaré imágenes mágicas que te ayudarán a sentirte seguro durante la noche." Damián, aunque escéptico al principio, decidió confiar en la princesa Valentina.

Así que cada noche, antes de que cayera la oscuridad, la princesa le mostraba a Damián hermosas imágenes de estrellas brillantes, bellos paisajes luminosos y figuras mágicas que lo llenaban de asombro y alegría.

Con el tiempo, Damián comenzó a sentirse cada vez más tranquilo durante la noche, y su miedo fue disminuyendo poco a poco. Finalmente, una noche, Damián se dio cuenta de que ya no temía a la oscuridad, y pudo dormir plácidamente por primera vez en mucho tiempo.

La princesa Valentina lo abrazó con ternura, feliz de haber ayudado a su amigo dragón.

Desde entonces, Damián ya no necesitó las imágenes para sentirse bien en la oscuridad, pero seguía agradecido a la princesa Valentina por su valiosa ayuda, y juntos vivieron muchas aventuras en el reino, enfrentando sus miedos y disfrutando de la compañía el uno del otro. Y colorín colorado, este cuento ha terminado.

FIN.

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