El valiente dúo de Caperucita y Lucas

Había una vez una pequeña niña llamada Caperucita, que vivía en un hermoso pueblo rodeado de bosques y montañas. Un día soleado, su mamá le dijo:- Caperucita, hoy iremos a visitar a tu abuela.

Toma esta canasta llena de comida y ve por el sendero del bosque. Pero ten cuidado con los peligros que puedas encontrar. Caperucita asintió emocionada y se dirigió al encuentro de su abuelita.

Mientras caminaba por el bosque, se encontró con un apuesto cazador llamado Lucas. - ¡Hola! ¿Quién eres tú? -preguntó curiosa Caperucita. - Hola pequeña, soy Lucas, el cazador del pueblo.

Estoy aquí para proteger a todos de los lobos feroces que acechan en este bosque -respondió Lucas con una sonrisa amable. Caperucita quedó impresionada por la valentía y amabilidad de Lucas. Decidió contarle sobre su visita a la abuela.

- Voy a ver a mi abuelita porque está enferma, pero no quiero ir sola al bosque -dijo Caperucita con tristeza-. Me da miedo encontrarme con algún lobo malvado.

Lucas se acercó dulcemente a la niña y le aseguró:- No te preocupes, yo te acompañaré hasta la casa de tu abuela para asegurarme de que estés segura todo el camino. Caperucita aceptó felizmente la compañía del cazador y juntos continuaron su viaje hacia la casa de la abuela.

Durante el trayecto, Lucas le enseñó a Caperucita sobre la flora y fauna del bosque, haciendo que el viaje fuera educativo y emocionante. Sin embargo, lo que ninguno de los dos sabía era que un lobo astuto llamado Griselda había estado observándolos desde la distancia.

Griselda planeaba hacerle daño a la abuela de Caperucita y aprovecharse de su inocencia. Cuando finalmente llegaron a la casa de la abuela, encontraron todo revuelto y a la abuela en cama con fiebre. Griselda había logrado entrar antes y se había disfrazado como ella para engañar a Caperucita.

- ¡Abuelita! ¿Qué te pasó? -exclamó Caperucita preocupada. - Oh, mi querida niña, estoy enferma.

Pero gracias al cazador valiente que te acompañó, pude pedir ayuda antes de caer en manos del lobo malvado -respondió Griselda con una voz ronca pero reconocible. Lucas rápidamente entendió lo que estaba sucediendo y decidió actuar. Tomando su arco y flechas, se dirigió hacia el bosque en busca del verdadero lobo mientras Caperucita cuidaba amorosamente de su —"abuelita" .

Después de una intensa búsqueda, Lucas encontró a Griselda escondida detrás de unos arbustos. Con gran habilidad, disparó una flecha justo al lado del lobo sin hacerle daño para asustarlo lo suficiente como para alejarlo del pueblo.

Regresando triunfante junto a Caperucita y su —"abuelita" , Lucas recibió el aplauso y agradecimiento de todos los habitantes del pueblo. Caperucita, por su parte, se dio cuenta de que el cazador era un verdadero héroe y valiente.

Desde ese día, Lucas se convirtió en un amigo cercano de Caperucita y su familia. Juntos, trabajaron para proteger al pueblo de cualquier peligro que pudiera acecharlo.

Y así, la historia de Caperucita Roja nos enseña sobre el valor de la amistad y la importancia de tener a alguien en quien confiar cuando enfrentamos dificultades. Además, aprendemos que no debemos dejarnos engañar por las apariencias y siempre debemos estar alerta ante posibles peligros en nuestro camino.