El valiente elefante Elio

Elio era un elefante muy simpático y alegre, pero tenía un gran problema: le tenía pánico a la oscuridad. Cada noche, cuando el sol se escondía y todo se ponía oscuro, Elio temblaba de miedo en su cueva.

Un día, mientras caminaba por la selva con su amiga Lupe la jirafa y su amigo Son el mono, les confesó su temor. Lupe, siempre tan comprensiva, le dijo: "Tranquilo Elio, no tienes por qué tener miedo.

La oscuridad puede ser algo desconocido para ti, pero no tiene por qué ser aterradora". "¡Pero es que no puedo evitar sentirme asustado!", respondió Elio con tristeza en sus ojos. Son, el mono travieso, tuvo una idea brillante.

"¡Ya sé! Mañana por la noche haremos una pequeña excursión nocturna por la selva. Te mostraremos que la oscuridad no es nada malo". Elio dudaba al principio, pero confiaba tanto en sus amigos que finalmente aceptó.

Al caer la noche al día siguiente, los tres amigos se adentraron en la selva iluminados solo por las estrellas y la luz de la luna. Elio sentía cómo el corazón le latía fuerte de miedo al principio.

Pero Lupe y Son estaban allí para él en todo momento, recordándole lo valiente que era y lo mucho que lo querían. "Mira Elio", dijo Lupe señalando hacia arriba.

"¿Ves todas esas estrellas brillantes en el cielo? Aunque estemos en la oscuridad, siempre habrá luz guiándonos". Elio levantó lentamente la mirada y contempló maravillado el hermoso espectáculo celeste sobre ellos. Poco a poco fue relajándose y sintiendo cómo su miedo se desvanecía.

"Y mira allá abajo", agregó Son emocionado señalando hacia unos luciérnagas brillantes entre los árboles. "Incluso en medio de las sombras más densas hay belleza esperando ser descubierta". Los tres amigos continuaron explorando juntos esa noche mágica.

Descubrieron sonidos nuevos y aromas frescos que solo aparecían cuando reinaba la oscuridad. Al regresar a casa antes del amanecer, Elio ya no temblaba ni sentía ese nudo en el estómago cuando pensaba en la oscuridad. "Gracias amigos", dijo con gratitud mirando a Lupe y Son.

"Hoy descubrí que aunque algo nos dé miedo al principio, siempre podemos superarlo si tenemos a quienes nos apoyen". Desde entonces, Elio dejó atrás su temor a la oscuridad gracias al valor de enfrentarla junto a sus entrañables amigos animales.

Y cada vez que veía caer el sol recordaba aquella noche especial donde encontró luz incluso en medio de las sombras más profundas.