El valiente payaso de la deep guep
Había una vez en el alegre y colorido mundo de Payasolanda, un payaso llamado Risitas. Risitas era conocido por su risa contagiosa y por traer alegría a todos los rincones de Payasolanda.
Un día, la malvada Deep Guep, una criatura temible que se alimentaba de la tristeza de los demás, llegó a Payasolanda sembrando el miedo y la oscuridad. Todos los habitantes de Payasolanda estaban aterrorizados y la risa se había desvanecido por completo.
-¡Oh no, qué haremos ahora! -exclamó Lunita, la payasita más valiente de todas. -No podemos dejar que la Deep Guep nos robe la alegría. Debemos hacer algo al respecto, no podemos rendirnos -dijo Risitas con determinación. Con valentía, Risitas decidió enfrentar a la Deep Guep.
Armado con su sonrisa y su ingenio, se adentró en el oscuro bosque donde se escondía la temible criatura. La Deep Guep intentó atemorizar a Risitas con sus terribles trucos y sombrías artimañas, pero el valiente payaso no se dejó intimidar.
-¡No tengo miedo de ti! -exclamó Risitas con voz firme. -Y sé que detrás de esa oscuridad también hay alegría y risas.
La Deep Guep, sorprendida por la determinación y la valentía de Risitas, comenzó a sentir una extraña sensación en su interior. Poco a poco, la oscuridad que la envolvía se fue disipando, y en su lugar, comenzaron a surgir destellos de luz y color.
Finalmente, la Deep Guep dejó de ser una criatura aterradora y se convirtió en una Deep Guep risueña, llena de alegría y bondad. La noticia de la valentía de Risitas y la transformación de la Deep Guep se extendió por todo Payasolanda, y la risa y la alegría volvieron a llenar cada rincón.
Desde entonces, Risitas y la Deep Guep se convirtieron en grandes amigos y juntos enseñaron a todos que incluso en los momentos más oscuros, la luz y la alegría siempre pueden encontrar su camino.
Y colorín colorado, este cuento se ha terminado.
FIN.