El valiente ratoncito y el lobo bondadoso

Había una vez en un hermoso bosque, un ratoncito llamado Mike. Mike era muy valiente y aventurero, pero tenía un gran miedo: le tenía pavor al lobo del bosque llamado Harry.

Este lobo era grande y animal, con unos ojos amarillos que parecían brillar en la oscuridad. Mike vivía felizmente en su madriguera junto a su familia y amigos, pero cada vez que salía a explorar el bosque, no podía evitar pensar en el temible Harry.

Su corazón se aceleraba y sus patitas temblaban de miedo. Un día soleado de primavera, mientras Mike jugaba con sus amigos cerca del río, escucharon un fuerte rugido proveniente del otro lado del bosque.

Todos los animales se asustaron y corrieron hacia sus hogares para resguardarse. Mike sintió un nudo en su estómago e imaginó lo peor. Pero algo dentro de él le decía que debía enfrentar su miedo para poder superarlo.

Así que tomó una profunda respiración y decidió ir a investigar qué estaba pasando. Con mucho cuidado, Mike se adentró en el oscuro bosque hasta llegar al lugar donde había escuchado el rugido. Para su sorpresa, encontró a Harry sentado bajo un árbol llorando desconsoladamente.

—"Hola" , dijo Mike tímidamente acercándose al lobo. "¿Estás bien?"Harry levantó la cabeza sorprendido por ver al pequeño ratoncito frente a él y respondió entre sollozos: "No estoy bien... Estoy perdido".

Mike sintió compasión por el lobo y decidió ayudarlo. Juntos caminaron por el bosque en busca del hogar de Harry, mientras conversaban y compartían historias. Con el paso del tiempo, Mike y Harry se convirtieron en grandes amigos.

El ratoncito descubrió que detrás de la apariencia aterradora de Harry, había un corazón amable y gentil. Un día, cuando Mike se encontraba jugando con sus amigos cerca del río, vio cómo algunos animales se acercaban lentamente a él. —"Mike" , dijo uno de ellos.

"Hemos visto cómo te has vuelto amigo del temible Harry". Mike sonrió orgulloso y respondió: "Harry no es tan malo como todos creen. Solo necesitaba alguien que lo escuchara".

Los demás animales quedaron sorprendidos al escuchar las palabras de Mike. Decidieron darle una oportunidad a Harry y pronto descubrieron lo mismo que el valiente ratoncito: detrás de su apariencia feroz, había un ser lleno de bondad y ternura.

Desde aquel día, los animales del bosque dejaron atrás sus prejuicios y aprendieron a conocerse unos a otros sin juzgar por las apariencias. Todos vivieron en armonía y amistad gracias al coraje e inteligencia emocional de Mike.

Y así fue como un pequeño ratoncito llamado Mike enseñó al mundo la importancia de enfrentar nuestros miedos, abrir nuestro corazón hacia los demás y aprender a ver más allá de las apariencias para encontrar verdaderas amistades.