El Valle de las Letras Mágicas
Había una vez, en un valle encantado, una niña llamada María del Cuento. Ella quería aprender a escribir, pero necesitaba letras para su cuento. Con entusiasmo y alegría en su corazón, María se adentró en el misterioso valle.
Allí encontró brujas risueñas y traviesas, que le ofrecieron ayuda sin tardar. "-¡Hola, María del Cuento! ¿En qué te puedo ayudar?"preguntó la bruja Ágata con bondad. "-Necesito encontrar la letra A", respondió María. "Para llenar mis páginas, es lo que debo hallar".
La bruja Ágata sonrió y asintió con agrado, y junto a María comenzaron a buscar. Recorrieron bosques oscuros y prados soleados, en busca de esa letra tan especial. De pronto, vieron un árbol gigante y frondoso, con hojas brillantes que formaban una A.
María saltó de emoción al verla por fin, y agradeció a Ágata por su gran ayuda. Pero cuando intentaron tomar la hoja dorada, un viento malvado las hizo volar lejos. Las dos corrieron tras ellas sin descanso, a través de montañas y ríos estrechos.
Finalmente, llegaron al castillo del Rey Alfabeto, donde las letras vivían felices y contentas. El rey les dio la bienvenida con alegríay les dijo: "-¡No os preocupéis más, buenas damas!""-Aquí están todas las letras que buscáis",dijo el Rey Alfabeto con una sonrisa.
"-Tomad la letra A y llenad vuestro cuento, con palabras mágicas que en él escribas". María del Cuento agradeció al rey y a Ágata, por ayudarla en su aventura tan emocionante.
Con su letra A en mano, volvió a su hogar, donde comenzó a escribir sin parar. Con cada palabra, creaba mundos de fantasía, donde los sueños cobraban vida y emoción. Aprendió que las letras tienen un gran poder, para crear historias llenas de imaginación.
Y así, María del Cuento se convirtió en escritora, inspirando a otros con sus cuentos encantados. Enseñando que el aprendizaje es un viaje maravilloso, y que las letras nos guían hacia lugares soñados.
FIN.