El valor de Juan
En el colegio Summa, Juan era un niño alegre y curioso. Le encantaba aprender y hacer amigos, pero un día algo cambió. Un grupo de chicos mayores empezó a burlarse de él, llamándolo nombres feos y empujándolo en el recreo.
Juan se sentía triste y asustado, no sabía qué hacer. Un día, mientras caminaba por el patio, escuchó a una maestra hablando sobre la importancia de hablar con alguien de confianza cuando se tiene problemas.
Juan decidió seguir su consejo y se acercó a su maestra favorita, la Señorita Ana. "Señorita Ana, estoy teniendo un problema en el colegio. Algunos chicos mayores me molestan y me hacen sentir mal", le confesó Juan.
La Señorita Ana escuchó atentamente y le aseguró a Juan que no estaba solo, que ella y otras maestras estaban allí para ayudarlo. Juntos, planearon una estrategia para detener el bullying.
Hablaron con el director, quien organizó una charla para toda la escuela sobre el respeto y la empatía. Los chicos que molestaban a Juan se dieron cuenta de que estaban lastimando a alguien más y decidieron disculparse.
A partir de ese momento, el colegio Summa se convirtió en un lugar más amable y comprensivo, y Juan recuperó su alegría y ganas de aprender. Descubrió el valor de expresar sus sentimientos y buscar ayuda cuando lo necesitaba, y aprendió que juntos se pueden superar los desafíos.
Juan se convirtió en un ejemplo de valentía y amistad, inspirando a otros niños a ser amables y solidarios.
FIN.