El valor de la amistad
Santiago era un niño curioso y emprendedor que un día encontró un billete de 100 soles en el parque. Mientras lo miraba con asombro, apareció su amigo Alex.
- ¡Santi! ¡Qué suerte encontrarte! ¿Qué harás con ese billete?
Santiago le contó emocionado sobre su hallazgo. Alex, siempre con ideas brillantes, le propuso invertir el dinero en la compra y venta de revistas. A Santiago le pareció emocionante y decidió seguir la propuesta de su amigo.
Juntos, compraron revistas en oferta y las vendieron a un precio justo en su barrio. Todo iba bien hasta que un día, al contar las ganancias, Santiago se dio cuenta de algo muy triste.
- Alex, falta dinero. ¿Lo has visto?
Alex evitó la mirada de su amigo y con voz temblorosa respondió: - Lo siento, Santi. Necesitaba el dinero y pensé que no te importaría.
Santiago se sintió traicionado y triste. No entendía por qué su amigo hizo algo así. Pero luego de un tiempo, reflexionó sobre el valor de la amistad. Decidió hablar con Alex y expresarle cómo se sentía. Alex, arrepentido, le pidió disculpas y le devolvió el dinero que le correspondía a Santiago.
Gracias a esa experiencia, Santiago aprendió sobre la importancia de la honestidad, la confianza y el perdón en una amistad. Decidió perdonar a Alex y juntos fortalecieron su amistad, prometiéndose siempre ser sinceros y solidarios el uno con el otro.
Desde entonces, Santiago y Alex aprendieron que, en la vida, el verdadero valor no está en el dinero, sino en el amor y la lealtad de los buenos amigos.
FIN.