El valor de la amistad

Había una vez cuatro amigos llamados José, Jozué, Mateo y Bere que siempre estaban juntos. Se divertían jugando al fútbol, contándose chistes y compartiendo sus meriendas en el recreo de la escuela.

Pero un día, una situación los hizo pelear y terminaron sin hablarse. José se sentía traicionado por Jozué, Mateo estaba enojado con Bere y todos se culpaban mutuamente por lo sucedido. Los días pasaron sin que nadie diera el primer paso para arreglar las cosas.

Los cuatro amigos se sentían tristes por no tener a sus mejores amigos a su lado. Un día, mientras caminaba por el parque, José encontró a una anciana sabia que le preguntó qué le pasaba.

Él le contó lo sucedido con sus amigos y cómo todo parecía perdido. La anciana sonrió y le dijo: "La amistad es como una planta. Si no la cuidas, se marchita y muere.

Pero si la riegas con amor y paciencia, crecerá fuerte y sana". José entendió el mensaje de la anciana sabia e intentó aplicarlo a su amistad con los demás. Decidió hablar primero con Jozué para explicarle cómo había sentido traicionado pero también escuchando su versión de los hechos.

Jozué también quería arreglar las cosas así que aceptó disculparse si había lastimado a José sin intención. Luego fueron donde Bere y Mateo para contarles lo ocurrido entre ellos tres.

La conversación fue difícil al principio pero poco a poco lograron entenderse mejor gracias a la sinceridad de José y Jozué. Finalmente, los cuatro amigos se abrazaron y prometieron nunca más dejar que una pelea arruinara su amistad.

Aprendieron que la comunicación honesta, el perdón y la empatía son las claves para mantener una amistad fuerte y sana. Desde ese día, los cuatro amigos siguieron jugando al fútbol juntos, contándose chistes y compartiendo sus meriendas en el recreo de la escuela.

Y cada vez que surgía un problema, lo hablaban abiertamente para encontrar una solución juntos.