El valor de la generosidad

En el reino de Fantasía, vivía una familia real compuesta por un rey, una reina y sus cinco hijos. El hijo mayor, Lucas, a menudo sentía que sus padres preferían a su hermano menor, Martín. Observaba cómo recibía regalos y atenciones especiales, mientras él parecía pasar desaparecibido. Poco a poco, la envidia se apoderaba de Lucas, y un sentimiento amargo crecía en su corazón.

Un día, la familia real recibió la visita de un sabio consejero, el cual percibió la tristeza de Lucas. Decidió tomarlo bajo su ala y le mostró las maravillas del reino, enseñándole la importancia de la generosidad y el amor hacia los demás. El sabio consejero compartió con Lucas historias sobre la bondad y el sacrificio, que le abrieron los ojos ante una nueva perspectiva.

Mientras tanto, en el reino, una terrible tormenta azotó el pueblo, dejando a muchos sin hogar ni alimentos. Lucas sintió una profunda empatía por los afectados y decidió tomar cartas en el asunto. Con la ayuda de sus hermanos, inició una campaña para recolectar donaciones y reconstruir las casas dañadas. Poco a poco, la envidia que sentía se desvanecía, reemplazada por la satisfacción de ayudar a los demás.

Con el tiempo, Lucas se convirtió en un líder compasivo y respetado en el reino. Su cambio de actitud inspiró a muchos, incluida su familia, quienes se sentían orgullosos de la valentía y nobleza de su hijo mayor. Desde entonces, la generosidad y la compasión se convirtieron en las virtudes más preciadas de la familia real de Fantasía, dejando atrás la envidia y el resentimiento.

Moraleja: La generosidad y el amor hacia los demás son cualidades que enriquecen el alma y traen felicidad a quien las practica.