El Valor de la Obediencia

Juancho Marajuancho, el osito verde, vivía en un hermoso bosque rodeado de árboles altos y coloridas flores. Un día, su abuelita Olguita le dijo: 'Juancho, hoy tienes que ir a visitar al sabio búho Don Ñandú.

Él tiene un consejo importante que darte'. - 'Pero abuelita, ¿por qué debo ir?' preguntó Juancho. - 'Es importante obedecer, Juancho. Don Ñandú tiene mucha sabiduría que compartir', respondió su abuelita. Juancho, algo renuente, decidió ir al encuentro del sabio búho.

Durante su camino, Juancho encontró a sus amigos, los conejos Saltarín y Pelusín, quienes lo invitaron a jugar. - 'Lo siento chicos, debo ir a ver al sabio búho Don Ñandú', les explicó Juancho.

- '¿Obedecer? ¡Qué aburrido! Nosotros preferimos divertirnos', dijeron los conejos saltando alegremente. Juancho continuó su camino, hasta que finalmente llegó al árbol donde vivía el sabio búho. Don Ñandú lo recibió con calidez y empezó a contarle una historia sobre la importancia de la obediencia.

Al escuchar atentamente, Juancho comprendió que la obediencia no solo significa seguir reglas, sino también escuchar a las personas que nos quieren y buscan nuestro bienestar.

Al salir del encuentro con Don Ñandú, Juancho se encontró con Saltarín y Pelusín, quienes estaban en problemas por desobedecer a sus padres. Juancho les ayudó a resolver la situación y les explicó lo que había aprendido.

Desde ese día, Juancho entendió que la obediencia era un valor que traía paz y armonía a su vida y a la de sus amigos, y decidió ser siempre obediente. Con el correr del tiempo, Juancho se convirtió en un ejemplo de buen comportamiento y todos en el bosque querían escuchar sus historias y aprender de sus enseñanzas.