El valor de la protección



Había una vez en un reino muy lejano, una princesa llamada Lucrecia que soñaba con ser mamá. Pero como ella vivía en un palacio lleno de magia, sabía que no era fácil encontrar el momento adecuado para tener hijos.

Un día, mientras paseaba por los jardines del palacio, se encontró con su amiga la hada madrina.

La princesa le contó su deseo de ser madre y la hada le dijo:"Querida Lucrecia, sé que deseas tener hijos pero primero debes aprender a cuidar y proteger lo que tienes. Si quieres ser una buena madre debes practicar la paciencia y la responsabilidad".

La princesa entendió el mensaje de su amiga y decidió empezar a prepararse para cuando llegara el momento de tener hijos. Comenzó a estudiar sobre crianza y educación infantil, también aprendió a cocinar platos saludables para darles a sus futuros hijos.

Pero un día todo cambió en el reino cuando un malvado hechicero llegó al palacio y amenazó con destruirlo si la princesa no entregaba su preciosa varita mágica. Lucrecia estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para proteger su hogar así que decidió enfrentarse al hechicero con valentía.

"No voy a permitir que dañes mi hogar ni tampoco mi varita mágica. Sé muy bien cómo utilizarla" - dijo la princesa mientras sostenía firmemente su varita. El hechicero comenzó a lanzarle conjuros peligrosos pero Lucrecia logró esquivarlos gracias a sus habilidades mágicas.

Finalmente, logró vencer al hechicero y proteger su hogar. Después de esta gran hazaña, la princesa se dio cuenta de que ya estaba preparada para ser madre.

Se casó con un príncipe muy amoroso y juntos tuvieron dos hijos maravillosos a los que criaron con mucho amor y sabiduría. A partir de ese momento, Lucrecia supo que no había nada más importante en su vida que su familia y su hogar.

Y aunque nunca dejó de lado sus habilidades mágicas, aprendió que lo más valioso era el amor y la responsabilidad para cuidar a quienes amas. Y así, la princesa Lucrecia vivió feliz para siempre junto a su esposo e hijos en el hermoso palacio lleno de magia.

FIN.

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