El valor de la valentía

Había una vez en un pequeño pueblo, un niño llamado Mateo, que siempre había soñado con ser valiente. Una noche, sus padres tuvieron que salir y lo dejaron solo en casa, algo que a Mateo le parecía un gran desafío.

Mientras preparaba la cena, comenzó a escuchar extraños ruidos que provenían del ático. A pesar de sentir miedo, decidió armarse de valor y subir a investigar. Allí descubrió una antigua caja con un libro polvoriento.

Al abrirlo, fue transportado a un mundo mágico y misterioso. En ese lugar, conoció a criaturas asombrosas que necesitaban su valentía para resolver problemas y superar sus propios miedos.

Mateo entendió que la verdadera valentía no es no tener miedo, sino enfrentarlo y seguir adelante a pesar de todo. Con cada desafío superado, se sentía más seguro y capaz. Al final, el libro lo devolvió a su casa, donde sus padres lo encontraron cenando tranquilo.

Mateo les contó su increíble aventura, demostrando que la valentía no solo reside en los valientes, sino en aquellos que se atreven a enfrentar sus temores. Desde esa noche, Mateo nunca dejó de sentir miedo, pero aprendió que su valentía era más fuerte.