El valor de ser uno mismo
Había una vez un niño llamado Juanito, quien sentía en su corazón que quería ser Juanita. Le encantaba la idea de ser una niña, elegir vestidos coloridos y tener el pelo largo.
Pero cuando decidió contarlo a sus amigos, ellos se burlaron de él y no lo aceptaron. Esto hizo que Juanito se sintiera muy triste y confundido. Pensó que tal vez estaba equivocado y que no podía ser Juanita.
Decidió dejar de pensar en ser alguien más y simplemente vivir como siempre lo había hecho. Sin embargo, una tarde, conoció a una chica llamada Valentina. Ella era divertida, amable y le gustaba mucho. Juanito se sintió emocionado y feliz de haber encontrado una amiga especial.
Pasaron mucho tiempo juntos, jugando y riendo. Pero un día, Valentina le dijo a Juanito que no quería ser su amiga. Juanito se sintió muy triste y confundido de nuevo. No entendía por qué Valentina ya no quería estar con él.
Fue entonces que recordó lo que realmente deseaba en su corazón: ser Juanita. A pesar de las burlas y el rechazo que había enfrentado, Juanito sabía que sería más feliz siendo quien realmente era.
Habló con sus padres y les explicó lo que sentía. Para su sorpresa, sus padres lo apoyaron y lo ayudaron a ser Juanita. Poco a poco, Juanita comenzó a sentirse más segura de sí misma.
Se dio cuenta de que, aunque algunas personas pudieran no entenderla o aceptarla, había otras que sí lo harían. Y lo más importante, Juanita se aceptaba a sí misma tal como era. Con el tiempo, conoció a más personas que la querían por quien era.
Valentina, que ahora comprendía mejor a Juanita, se disculpó por haberla rechazado y se convirtieron en buenas amigas. Juanita aprendió que lo más importante en la vida era ser fiel a uno mismo, a pesar de las dificultades.
Descubrió que no importaba lo que dijeran los demás, sino cómo se sentía en su corazón. Y desde entonces, Juanita vivió una vida llena de amor, amistad y felicidad, siendo verdaderamente ella misma.
FIN.