El verano mágico de Enzo y Evian
Enzo y Evian estaban emocionados porque pasarían el verano en casa de sus abuelos. Mientras mamá preparaba su nuevo hogar en la ciudad a la que se mudarían, los niños disfrutarían de unos meses mágicos en el campo.
Desde el primer día, los abuelos los acogieron con amor y los niños se sintieron felices de estar rodeados de naturaleza. Pasaron las mañanas explorando el jardín, buscando insectos y observando las estrellas del cielo despejado. Por las tardes, el abuelo los llevaba a pescar al lago cercano, mientras la abuela les enseñaba a hacer deliciosas galletas. Cada día era una aventura diferente.
Un día, mientras jugaban en el jardín, Enzo y Evian encontraron un viejo baúl. Con curiosidad, lo abrieron y descubrieron que estaba lleno de juguetes antiguos. Entre ellos, hallaron un mapamundi muy gastado. La abuela les contó que ese mapa pertenecía a su abuelo, un gran viajero que les había dejado un mensaje oculto: "La verdadera aventura está en descubrir el mundo".
Los niños se emocionaron con la idea de descubrir nuevos lugares y culturas. Decidieron crear su propio mapamundi, marcando los lugares que les gustaría visitar. Así, pasaron el verano aprendiendo sobre diferentes países, sus tradiciones y costumbres. También se propusieron investigar sobre su nueva ciudad y el colegio al que asistirían.
Llegó el día de despedirse de los abuelos para empezar esta nueva etapa. Con el mapa en mano y el corazón lleno de ilusión, Enzo y Evian no podían esperar a vivir nuevas aventuras en su nuevo hogar, sintiéndose afortunados por tener recuerdos felices del verano mágico en casa de sus abuelos.
FIN.