El vestido encantado de las amigueras costureras

En un barrio muy lejano, vivían tres costureras, Carmen, Juana y Teresa, muy buenas amigueras.

Ellas cosían y tejían, con aguja e hilo en mano, creaban prendas divinas, con mucho amor y empeño en cada plano. Una tarde de primavera, llegó al taller una visita inesperada, era la hada Costurina, tan bella como una flor dorada.

"Buenas tardes queridas costureras, he oído hablar de su destreza, y vengo a proponerles una tarea muy especial, que les llenará de alegría y fortaleza".

Las tres amigas emocionadas aceptaron el desafío, la hada les contó sobre una princesa en apuros, necesitaba un vestido mágico para el baile del rocío. "Deben tejer con hilos de oro puro, una prenda única y brillante, que refleje la luz del futuroy lleve esperanza a cada habitante".

Sin dudarlo ni un segundo, Carmen, Juana y Teresa se pusieron manos a la obra, tejieron día y noche sin descanso alguno, con paciencia y ternura en cada puntada que sobresalga. El vestido tomaba forma poco a poco, cada detalle era perfecto y reluciente, las costureras trabajaban con todo su locohasta que quedara imponente.

Llegó el día del gran baile real, donde la princesa luciría su nuevo atuendotodos admiraban el trabajo genialde las costureras que habían hecho un gran esfuerzo.

La princesa apareció radiante como el sol vestida con el traje más hermoso jamás vistolas costureras sintieron su corazón latir con pasiónal verla feliz luciendo aquel vestido tan exquisito. La hada Costurina apareció entre las sombras para felicitar a las valientes mujeres por haber demostrado tanta bondad en sus obras y por haber cumplido con éxito todas las tareas.

Desde ese día en adelante las tres amigueras siguieron cosiendo juntas creando prendas elegantespara todos los habitantes del lugar sin ninguna disputa.

Y colorín colorado este cuento ha terminadolas costureritas siguen tejiendo historias de ensueñodemostrando que con esfuerzo y amor todo es alcanzado¡Que viva la amistad y la creatividad en este pequeño rebaño!