El Viaje de Callo
En un colorido bosque lleno de árboles altos y flores de todos los colores, vivía un pequeño ave llamada Callo. Callo era un canario que tenía el sueño de volar tan alto como las águilas. Sin embargo, a menudo se sentía inseguro, ya que comparado con otros pájaros, él era pequeño y sus alas no eran muy grandes.
Un día, mientras Callo exploraba el bosque, se encontró con una extraña medalla brillante en el suelo, que tenía tallados el sol, la luna y las estrellas. Cuando la recogió, una suave luz la envolvió.
"¿Qué es esto?" - se preguntó Callo, observando la medalla. De repente, una voz melodiosa lo sorprendió.
"¡Hola, Callo! Soy Medalla Tierra, el guardián de este bosque. He visto cómo deseas volar alto. Esta medalla tiene el poder de ayudarte a encontrar tu valor interno", dijo la medalla.
Callo se sorprendió. "¿Valor interno? No estoy seguro de qué es eso. Me siento tan pequeño y frágil..."
"No te dejes llevar por lo que ves en el exterior. Supérate y descubrirás que dentro de vos hay una fuerza poderosa, solo necesitas intentarlo. Te ayudaré a despegar. ¡Sígueme!"
Callo, emocionado, decidió seguir a Medalla Tierra. Juntos viajaron a través del bosque, donde conocieron a varios amigos, todos con sus propios miedos e inseguridades. A lo largo de su camino, Callo escuchó las historias de sus amigos. La pequeña ardilla, Lila, le contó que tenía miedo a saltar de un árbol a otro.
"Lo intento, pero siempre me da miedo caer" - dijo Lila con un susurro.
Callo la apoyó: "¡Pero si caes! Siempre puedes intentarlo de nuevo. Yo a veces soy tímido, pero estoy aprendiendo a volar. Juntos podemos superar nuestros miedos".
Un poco más adelante, encontraron a una tortuga llamada Tito, que se sentía lenta y torpe en comparación con sus amigos que corrían.
"Nunca seré tan rápido como ellos" - lamentó Tito.
"Tu velocidad es diferente, pero tienes la sabiduría y la paciencia. ¡Podrías enseñarles a disfrutar del camino!" - sugirió Callo.
Todos se sintieron inspirados por la amabilidad de Callo. **Pero había más por descubrir.** Al llegar a un gran acantilado, se encontraron con un grupo de aves intentando volar y aterrizar en una magnífica cueva en la cima.
"¡Es imposible!" - gritó un ave asustada. "¡No puedo hacerlo!"
Medalla Tierra se dirigió a todos, "¿Qué pasaría si ustedes volaran juntos? Lo que necesitas es confianza y apoyo del grupo. ¡Callo, intenta volar a su lado!"
Callo, sintiendo el aliento fresco del viento y la emoción en sus alas, respiró hondo y decidió intentarlo. "¡Vamos! ¡A volar juntos!" - gritaron todos emocionados.
Así, Callo tomó aire y, en un sorprendente acto de valentía, comenzó a volar. Con cada batir de alas, su confianza creció. Las otras aves fueron tras él, siguiendo su ejemplo, y pronto todos lograron llegar a la deliciosa cueva.
"¡Lo logré!" - exclamó Callo lleno de entusiasmo. "¡Lo hicimos juntos!"
Medalla Tierra sonrió, "Recuerden, el verdadero poder está en nuestra unidad y en creer en nosotros mismos. No se trata de ser el más grande o el más rápido, sino de encontrar nuestro propio valor y apoyarnos mutuamente".
Con esto, Callo descubrió que las palabras de Medalla Tierra eran verdaderas. Ya no se sintió pequeño, sino parte de un grupo fuerte y unido que podía lograr cualquier cosa. Desde ese día, Callo voló alto, no solo por sí mismo sino llevando a sus amigos con él. El pequeño canario se volvió una fuente de inspiración para todos los habitantes del bosque.
Y así, Callo, Lila, Tito y todos sus amigos recordaron que a veces, solo necesitamos un poco de apoyo y confianza para alcanzar nuestras metas más altas. Y cada vez que miraban al cielo, sabían que juntos podían llegar muy lejos.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
FIN.