El Viaje de Fede y su Cometa

Fede era un niño que vivía en un pueblito rodeado de montañas. Le encantaba hacer cometas de papel y soñaba con volar una que fuera gigante. Un día, se le ocurrió una idea: -Tengo que hacer la cometa más grande del mundo. ¡Así podré tocar el cielo! -.

Fede pasó semanas recolectando papel, pegamento y cintas. Con la ayuda de su amiga Lila, comenzaron a construir la cometa. -¿Te imaginas lo que sería volar tan alto? -, le dijo Lila emocionada.

Finalmente, el día de la gran prueba llegó. Fede y Lila llevaron su cometa al campo. El viento soplaba fuerte. Cuando soltaron la cuerda, la cometa se elevó majestuosa. ¡Era enorme!

Pero de repente, una ráfaga de viento inesperada la hizo dar un giro. -¡La cometa se está yendo! - gritó Fede.

Ambos corrieron tras ella, tratando de atraparla. Sin embargo, la cometa se enredó en un árbol. Fede se sintió muy triste. -No sé qué hacer, Lila. He trabajado tanto por esto y ahora se arruinó-.

Pero Lila sonrió. -Fede, esto es solo un obstáculo. ¿Qué tal si usamos nuestras habilidades para solucionarlo?

Pensaron juntos y, después de un rato, encontraron una manera de liberar la cometa. La sacaron con la ayuda de una escalera y mucha colaboración.

Al final, la cometa voló otra vez y esta vez ¡más alto que nunca! -¡Lo logramos! -, exclamó Fede.

Desde ese día, Fede aprendió que los problemas se pueden solucionar con creatividad y trabajo en equipo. Y que volar alto, a veces, significa no rendirse nunca.