El viaje de Juan y Renata



que vivía en un hermoso estanque en medio del campo. Juan era un patito muy curioso y siempre estaba explorando su entorno, nadando de un lado a otro y jugando con los otros animales que vivían cerca.

Un día, mientras juan nadaba por el estanque, se encontró con una rana llamada Renata. Renata estaba triste porque había perdido su casa, así que juan decidió ayudarla a encontrar un nuevo lugar donde vivir.

"Hola Renata, ¿cómo estás? ¿Puedo ayudarte en algo?" -preguntó juan con amabilidad. Renata miró a juan con sorpresa y respondió: "Hola juan, estoy triste porque perdí mi casa y no tengo dónde vivir".

Juan sonrió y dijo: "No te preocupes, yo te ayudaré a encontrar un nuevo hogar. Vamos juntos a buscar un lugar seguro y acogedor". Así, juan y Renata emprendieron un viaje por el campo, recorriendo bosques, praderas y ríos en busca del lugar perfecto para la rana.

En el camino, se encontraron con varios desafíos como un arroyo difícil de cruzar o una tormenta que los obligó a refugiarse bajo un árbol. A pesar de todo, juan nunca perdió la esperanza y siempre animaba a Renata con palabras de aliento.

Finalmente, después de mucho buscar, encontraron una hermosa laguna rodeada de flores y árboles frondosos donde Renata podría hacer su nueva casa. "¡Mira Renata! Este lugar es perfecto para ti.

Aquí podrás construir tu hogar y estar segura" -dijo juan emocionado. Renata saltaba de alegría y le dio las gracias a juan por toda su ayuda. Desde ese día, juan y Renata se convirtieron en grandes amigos y pasaban horas jugando juntos en la laguna.

La historia de juan enseña que siempre es importante ser amable y solidario con los demás. Aunque enfrentemos dificultades en el camino, si mantenemos la esperanza y ayudamos a quienes lo necesitan, podemos lograr cosas maravillosas.

Y así fue como Juan el patito demostró que incluso siendo pequeño se pueden lograr grandes cosas cuando se tiene un corazón bondadoso.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!