El viaje de la semillita



Había una vez una semillita que vivía en lo más profundo de la tierra. La semillita soñaba con ver la luz del sol y crecer tan alto como los árboles que veía desde su pequeño rincón bajo tierra.

Un día, la lluvia la empujó hacia la superficie y la semillita asomó tímidamente su brotecito hacia el mundo exterior. -¡Hola mundo! -dijo la semillita al sentir el cálido sol acariciando su diminuto tallo.

A partir de ese momento, la valiente semillita emprendió un viaje emocionante en el que conoció a nuevos amigos como el gusano de tierra, la abeja trabajadora y el pájaro cantor.

Cada encuentro le enseñó lecciones valiosas sobre el crecimiento, la amistad y la importancia de perseverar en busca de nuestros sueños.

Con el tiempo, la semillita se convirtió en un hermoso girasol que alegraba con su resplandor a todos los que se cruzaban en su camino, mostrando que aunque seas pequeño, siempre puedes lograr cosas maravillosas si mantienes viva la esperanza en tu corazón.

FIN.

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