El viaje de las hermanas

Era una tarde de verano y Carola y Malena estaban jugando en el jardín. De repente, empezaron a sentir ganas de hacer pis, pero como estaban muy entretenidas con su juego, decidieron aguantar un poco más.

Sin embargo, no pudieron aguantar más y terminaron haciendo pis encima. Se sintieron avergonzadas y tristes por lo que había pasado. Esa noche, antes de dormir, encontraron un cuento mágico bajo sus almohadas.

Era un cuento sobre dos hermanas que se embarcaban en un viaje mágico por mundos fantásticos para encontrar la solución a sus problemas. "¡Mira Malena! ¡Es como nosotras!" -exclamó Carola emocionada al leer el primer párrafo del libro-.

"¡Podemos aprender mucho de ellas!"Las hermanas leyeron el cuento con atención y se dieron cuenta de que las protagonistas habían encontrado la solución a sus problemas gracias a la magia que había dentro de ellas mismas.

"¿Y si nosotras también tenemos magia dentro?" -preguntó Malena esperanzada. "Claro que sí" -respondió Carola-. "Debemos creer en nosotros mismos y buscar esa magia". Al día siguiente, las hermanas decidieron emprender su propio viaje mágico.

Caminaron durante horas hasta llegar a un bosque encantado donde se encontraron con hadas y duendes. Allí aprendieron muchas cosas nuevas sobre ellos mismos y descubrieron habilidades mágicas sorprendentes.

Finalmente llegaron al final del camino donde encontraron el tesoro oculto: una botella de agua mágica que les permitiría controlar su vejiga. "¡Lo logramos!" -exclamaron las hermanas emocionadas-. "Encontramos la solución y todo gracias a la magia que había dentro de nosotros". Desde ese día, Carola y Malena ya no tuvieron problemas para controlar su vejiga.

Habían aprendido una valiosa lección sobre creer en sí mismas y encontrar la magia que hay dentro de cada uno.

Y así, con sus corazones llenos de alegría y esperanza, regresaron a casa felices por haber emprendido un viaje mágico juntas.