El viaje de Lila
Había una vez, en un bosque encantado, una pequeña ninfa llamada Lila. Ella era muy curiosa y siempre estaba explorando su hogar entre los árboles y las flores.
Un día, mientras jugaba cerca del arroyo del bosque, escuchó el sonido de agua corriendo más fuerte de lo normal. Sintió la curiosidad de investigar qué estaba sucediendo y fue a ver.
Al llegar al arroyo, descubrió que había llovido mucho en las montañas cercanas, y el agua había crecido tanto que se desbordó hacia el bosque. Lila se asombró al ver cómo el agua arrastraba todo a su paso: piedras, ramas e incluso animales pequeños.
De repente, sin darse cuenta de lo que hacía, Lila se cayó al arroyo. El agua la llevó lejos del bosque hasta un río grande y desconocido para ella.
Asustada pero valiente, comenzó a nadar con todas sus fuerzas tratando de encontrar algo familiar en aquel mundo acuático nuevo para ella.
Mientras nadaba por el río buscando ayuda o algún lugar seguro donde refugiarse, notó que había muchos otros seres vivos como ella en ese mundo submarino: peces grandes y pequeños; tortugas; ranas; ¡y hasta tiburones! Pero no todos eran amigables...
En medio de tanta diversidad animal encontró a una simpática nutria llamada Nico que le ofreció ayuda:"¡Hola amiga! Veo que andás perdida por aquí ¿necesitás ayuda?""Sí por favor" respondió LilaNico la llevó a una pequeña isla en el río donde encontraron un grupo de ranas simpáticas que les explicaron cómo sobrevivir en ese nuevo mundo acuático. Lila aprendió a respirar bajo el agua y también descubrió cómo encontrar comida.
Sin embargo, mientras exploraba su nuevo hogar, se topó con un pez muy grande que quería comérsela. Lila recordó lo que le habían enseñado las ranas y juntos crearon una estrategia para escapar del peligroso depredador.
A medida que pasaban los días, Lila se adaptaba cada vez más al mundo acuático y comenzaba a sentirse segura en ese lugar desconocido. Decidió entonces explorar más allá de la pequeña isla donde había llegado por primera vez.
Un día, durante una de sus aventuras submarinas, encontró un camino de luz brillante debajo del río. Sin pensarlo dos veces decidió seguirlo hasta llegar a un hermoso arcoíris subacuático.
Allí descubrió algo maravilloso: ¡un portal mágico que la llevaría de vuelta a su hogar en el bosque! Con coraje y determinación, Lila atravesó el portal y volvió sana y salva al bosque encantado donde todos sus amigos estaban esperándola con ansias.
Les contó todas sus aventuras acuáticas y les enseñó todo lo que había aprendido sobre el mundo submarino. Desde entonces, Lila se convirtió en una experta nadadora e incluso organizaba expediciones al mundo acuático para compartir con sus amigos los secretos del río.
Y así termina esta historia inspiradora sobre la valentía, la exploración y el aprendizaje. Una historia que nos enseña a no tener miedo de lo desconocido y siempre estar dispuestos a aprender cosas nuevas.
FIN.