El viaje de los patos en busca del agua


En un lago llamado Brillante Azul, vivía un grupo de patos felices. Disfrutaban chapoteando en el agua fresca y pura, jugando y nadando sin parar. Pero un verano, el lago comenzó a secarse lentamente.

Los patos notaron que el agua disminuía día a día, y se preocuparon. "¿Qué está pasando con nuestro querido lago?", preguntó el Pato Mayor. "No lo sé, pero si el lago se seca, tendremos que buscar otro lugar para vivir", respondió la Pata Clara.

Decidieron emprender un viaje en busca de agua. "¿A dónde iremos?", preguntó el Pato Lucas, nervioso. "Buscaremos el Río Esmeralda, un lugar donde siempre hay agua", propuso optimista la Pata Marta.

Así, los patos comenzaron su largo viaje, enfrentando desafíos y haciendo nuevos amigos en el camino. A medida que se alejaban del lago, aprendían a adaptarse a diferentes entornos ecológicos. Al fin, luego de muchas aventuras, encontraron el Río Esmeralda, un lugar maravilloso con abundante agua.

Los patos celebraron su hallazgo, agradecidos y felices. Decidieron hacer del río su nuevo hogar, donde vivirían en armonía y cuidarían el agua con mucho cariño.

Así, los patos de Brillante Azul encontraron una lección valiosa: la importancia de adaptarse a los cambios y buscar soluciones juntos en tiempos difíciles. Además, descubrieron que el cuidado del medio ambiente es fundamental para que todos los seres vivos puedan disfrutar de un mundo mejor.

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