El viaje de Mateo y el pájaro mágico
Había una vez un niño llamado Mateo, a quien le encantaba dibujar. Pasaba horas y horas creando mundos imaginarios en papel con sus colores brillantes y su caja llena de lápices.
Cada día, después de la escuela, corría a su habitación para sumergirse en su pasión por el arte. Un día, mientras dibujaba un paisaje lleno de árboles y animales fantásticos, algo mágico ocurrió.
Uno de sus dibujos cobró vida y un pequeño pájaro salió volando del papel, revoloteando por la habitación.
Mateo no podía creer lo que veía, ¡sus creaciones se estaban volviendo reales! El pájaro parloteó alegremente y le dijo a Mateo: "¡Gracias por darme vida con tus colores! Ahora podemos explorar juntos este mundo que has creado". Emocionado, Mateo tomó su caja de dibujos y salió corriendo tras el pájaro aventurero. Caminaron juntos por praderas llenas de flores de todos los colores que Mateo había pintado.
Se encontraron con unicornios saltarines y hadas risueñas que danzaban alrededor de ellos. Cada criatura cobraba vida gracias al talento artístico de Mateo. Sin embargo, no todo era perfecto en este mundo imaginario.
Una sombra oscura comenzó a extenderse sobre la tierra, amenazando con devorar toda la belleza que habían creado juntos. El pájaro le dijo a Mateo: "Solo tus colores y tu creatividad pueden salvarnos".
Determinado a proteger su mundo mágico, Mateo tomó sus lápices más brillantes y empezó a dibujar una luz resplandeciente que disipaba la oscuridad. Con cada trazo certero, el mal se iba desvaneciendo hasta desaparecer por completo.
Al final del día, exhaustos pero felices, Mateo y el pájaro se sentaron juntos a contemplar el atardecer en su maravilloso universo lleno de magia e imaginación. El ave lo miró con cariño y le dijo: "Nunca subestimes el poder de tus sueños plasmados en papel".
Desde ese día en adelante, Mateo siguió explorando nuevos mundos con sus dibujos y compartiendo su don especial con todos aquellos dispuestos a ver más allá del papel y los colores.
Y así fue como un niño común descubrió la extraordinaria magia que puede surgir cuando se mezcla la creatividad con un corazón valiente.
FIN.