El viaje de Ramón en busca de la bondad

Había una vez en la frondosa selva, un simpático mono llamado Ramón, quien por su amor por las bananas, siempre se aseguraba de tener un montón de ellas cerca.

Un día, al despertar, Ramón notó que no le quedaba ni una sola banana para desayunar. Decidido a encontrar más, se adentró en la selva en busca de su amada fruta. Después de buscar y buscar, Ramón no lograba encontrar ni una sola banana.

Desanimado y hambriento, estuvo a punto de rendirse cuando notó a unos niños recolectando bananas cerca de un árbol. Molesto al ver que esos niños tenían todas las bananas para ellos, Ramón decidió alejarse y buscar en otro lado.

Sin embargo, en el camino, se cruzó con una serpiente que necesitaba ayuda para desenredarse de unas ramas. A pesar de estar molesto por no encontrar bananas, Ramón recordó que siempre es importante ayudar a los demás.

Con su habilidad para trepar árboles, Ramón ayudó a la serpiente a liberarse. Agradecida, la serpiente le mostró a Ramón un lugar secreto donde crecían las bananas más deliciosas de toda la selva.

A partir de ese día, Ramón aprendió que siempre es mejor ser amable y ayudar a los demás, incluso cuando las cosas no van como uno espera. Y así, el mono Ramón nunca volvió a pasar hambre, ¡porque ya no solo encontraba bananas, sino también mucha bondad por el camino!