El viaje de regreso a casa del búho perdido

Había una vez un búho llamado Copito que vivía en el profundo bosque junto a su mamá. Copito era curioso y aventurero, y le encantaba explorar el bosque, pero un día, mientras volaba por los árboles, se desvió de su camino y terminó perdido en el colegio Winter Garden. El colegio era grande y estaba lleno de niños y niñas que jugaban y estudiaban. El búho se sintió asustado al principio, pero luego se dio cuenta de que los chicos eran amables y le gustaban mucho los juegos que inventaban.

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Mincho y Viole, dos amigos del colegio, vieron al búho y se acercaron con curiosidad. "¡Miren! ¡Un búho en el colegio!", exclamó Mincho emocionado. Viole sonrió y dijo: "Debemos ayudarlo a regresar a su casa". Los dos amigos se propusieron encontrar la manera de ayudar al búho perdido.

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Mientras tanto, Copito pensaba en su mamá y en lo mucho que la extrañaba. Quería volver a su hogar en el bosque, pero no sabía cómo. Mincho y Viole se acercaron y le preguntaron: "¿Cómo te llamas, búho? ¿Estás perdido?". El búho les contó su historia y les dijo que extrañaba a su mamá. Los amigos se ofrecieron a ayudarlo a regresar a casa y buscaron en los libros de la biblioteca del colegio para encontrar información sobre búhos y sus hábitats.

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Después de investigar, descubrieron que los búhos viven en bosques con muchos árboles y decidieron buscar pistas en el patio del colegio. Durante la búsqueda, encontraron plumas y restos de comida que les indicaron que Copito se sentía cerca de su hogar. Emprendieron un viaje por el patio, explorando cada rincón hasta que escucharon un suave ulular que provenía de un árbol. Era la mamá búho que había venido al colegio en busca de su hijo.

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Los ojos de Copito brillaron de felicidad al ver a su mamá. "Gracias por ayudarme a encontrar a mi hijo", dijo la mamá búho agradecida. Mincho y Viole sintieron que habían logrado algo increíble al ayudar al búho a volver a casa. "Nunca dejen de ser curiosos y amables", les dijo la mamá búho. "Esas son cualidades maravillosas que los hacen grandes amigos".

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Copito se despidió de sus nuevos amigos con un suave aleteo, prometiéndoles que volvería a visitarlos en el colegio Winter Garden. Mincho y Viole se abrazaron felices, sabiendo que habían hecho una buena acción. A partir de ese día, siempre recordaron la aventura del búho perdido y la importancia de ayudar a quienes lo necesitan.

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Y así, Copito regresó feliz junto a su mamá en el bosque, mientras Mincho y Viole siguieron compartiendo su amistad y sus aventuras en el colegio Winter Garden.